¡Menos gases!
Plantas medicinales para el tratamiento de la presencia excesiva de flatulencias en el tubo digestivo
Entendemos por flatulencia la presencia de gases en el tubo digestivo, y por meteorismo la distensión del abdomen, debida fundamentalmente a los gases formados por procesos fermentativos en el intestino. Aclarados estos dos conceptos cabe destacar ahora que se trata de padecimientos muy extendidos entre la población. Seguramente muchos lectores sufren a menudo sus consecuencias, pero no les conceden demasiada atención porque en muchos casos los trastornos son más bien leves y se llegan a aceptar casi como normales. En realidad, la flatulencia y el meteorismo son síntomas detrás de los cuales pueden hallarse una gran variedad de enfermedades.
Circulación insuficiente
No siempre la molesta y pertinaz presencia de gases en estómago e intestino se debe a un incremento de los procesos fermentativos dependientes del tipo de alimentación y de su insuficiente masticación y ensalivación, sino que puede ser causada también por una insuficiente reabsorción de los gases por las paredes del tubo digestivo a causa de una insuficiencia circulatoria (irrigación escasa del intestino), la mayoría de las veces de tipo arteriosclerótico y que, por lo tanto, suele observarse con mayor frecuencia entre las personas de edad avanzada.
Vesícula y vías biliares
Otras veces, en cambio, el meteorismo se debe a afecciones solapadas de la vesícula y vías biliares, pudiéndose observar a menudo cómo la sensación de repleción y presión en el estómago, acompañada de la emisión frecuente de eructos que presentan algunos pacientes, se atribuye erróneamente a un padecimiento del estómago, cuando, en realidad, se trata de una colecistopatía (trastornos a nivel de la vesícula y vías biliares).
Debido precisamente a la gran variedad de causas que son responsables de la flatulencia y el meteorismo, y que muchas veces el médico se ve imposibilitado de diagnosticar correctamente, es por lo que es conveniente adoptar, en este caso, un tratamiento sintomático en esencia. No debe olvidarse que, a pesar de que como naturistas nuestro objetivo fundamental debe ser el favorecer la puesta en marcha de los procesos autocurativos del enfermo (mediante remedios naturales y no perjudiciales) y que siempre se debe aspirar a un tratamiento global de la persona, no conviene fanatizar ni pontificar nuestro convencimiento, sino que debemos tener la claridad de visión y los conocimientos suficientes para saber que a veces es conveniente emplear un tratamiento sintomático que libre al dolorido enfermo de sus padecimientos.
Puede afectar al estado de ánimo
La presencia excesiva de gases en el tubo digestivo puede llegar a convertirse en un verdadero calvario para quien lo sufre. A pesar de que no acostumbran a producir sensación dolorosa alguna (pequeños cólicos algunas veces) la pesarosa sensación de repleción afecta de forma notoria el estado de ánimo, el apetito y el sueño de algunas personas.
En otros casos no es poco frecuente que el estómago o intestino repletos de gases ejerzan una cierta presión sobre el corazón, a través del diafragma que los separa, y se produzca por vía refleja una disminución de la irrigación coronaria (irrigación del corazón) dando lugar a síntomas como: palpitaciones, molestias a nivel del corazón y náuseas a veces acompañadas de dolores de estómago. Es lo que en medicina se conoce con el nombre de “Síndrome gastrocardíaco de Roemheld”.
Fitoterapia: excelentes remedios con plantas medicinales
Dentro del amplio campo de posibilidades de la medicina natural, las plantas medicinales ejercen un papel decisivo en el tratamiento de los padecimientos que nos ocupan. Las plantas especialmente empleadas en estos casos se conocen con el nombre de “carminativas”. Este nombre procede de la palabra latina “carminare”, que significa limpiar, depurar o purificar y proviene de una época en la que se tenía una consideración y un concepto diferentes de los actuales sobre la verdadera acción de estas plantas. Algunas de ellas las conocemos de otros capítulos, como la menta, la manzanilla, la melisa y la angélica, de las que ya tratamos al ocuparnos de los padecimientos del estómago.
También poseen propiedades carminativas algunas de las plantas para los trastornos del hígado y vías biliares, como el ajenjo, menta y milenrama, como señala el Dr. Frederic Vinyes. En este sentido aconseja una tisana para padecimientos de la vesícula biliar, con una marcada acción carminativa y un suave efecto laxante a base de menta, milenrama, comino,
hinojo y hojas de sen (que pueden omitirse, si no se necesita acción laxante). De 1 a 2 cucharaditas por taza de agua hirviendo. Se deja reposar unos 15 minutos y se tomará dos veces al día (mañana y noche) ininterrumpidamente.
Todas las plantas con acción carminativa poseen aceites esenciales (también llamados etéreos o volátiles) a los cuales cabe atribuir dicha acción. Las más importantes, y que aquí vamos a tratar, pertenecen a la familia botánica de las umbelíferas y son la alcaravea, el comino, el hinojo y el anís.
En este artículo hacemos mención tan sólo de aquellas plantas cuya acción carminativa está en primer término, y que, por tanto, prácticamente sólo se emplean como tales.
Todas las plantas con acción carminativa poseen aceites esenciales (también llamados etéreos o volátiles) a los cuales cabe atribuir dicha acción. Las más importantes, y que aquí vamos a tratar, pertenecen a la familia botánica de las umbelíferas y son la alcaravea, el comino, el hinojo y el anís.
ALCARAVEA
La alcaravea (Carum carvi) se cría en los prados húmedos de las montañas, sin embargo, con fines medicinales se em- plea principalmente la planta de cultivo, y de ésta sus frutos, los cuales llegan a contener de un 3 a 7% de aceites esenciales. Ejerce una poderosa acción carminativa , a la vez que una ligera acción sobre el aparato respiratorio. La alcaravea se emplea también muy a menudo como condimento. En particular, en aquellos alimentos que producen flatulencia con facilidad, como son, por ejemplo, toda la variedad de coles. Una acción similiar a la de la alcaravea la ejercen también los pequeños frutos del eneldo (“Anethum graveolens”); planta que como condimento se utiliza, tierna, toda entera.
COMINO
El comino (Cuminum cyminum) es una planta originaria de Etiopía que ya en el antiguo Egipto fue muy apreciada como medicinal. Incluso en las pirámides egip-
cias fueron encontrados frutos secos de esta umbelífera. En nuestro país apenas se cría de forma silvestre, por lo que se ha convertido también en una planta de cultivo, y de la que al igual que la anterior se emplean sus frutos. Contiene un 3% de aceites esenciales, así como substancias amargas, por lo que aparte de presentar una notable acción carminativa ejerce además una acción estimulante del apetito . Se usa también como condimento en numerosos platos, pudiéndose emplear tanto entero como molido (en este último caso mantiene su aroma y propiedades condimenticias hasta 12 meses después de su molienda, si se conserva en tarritos herméticamente cerrados).
HINOJO
El hinojo (Foeniculum vulgare) es una planta originaria del sur de Europa. Es de mayor tamaño que las dos anteriores, pudiendo llegar a alcanzar la altura de un hombre. Se cría en toda nuestra península, en ribazos y barbechos de tierra baja. Sus frutos contienen de un 2 a un 6% de aceites esenciales. Su acción es fundamentalmente carminativa, a la vez que moderadamente expectorante. La acción carminativa del hinojo no es tan destacada como la de la alcaravea, sin embargo, suele- gozar de predilección frente a ésta debido a su más agradable sabor. No pocas veces se combinan ambas plantas para aprovechar la poderosa acción carminativa de la alcaravea y el sabor del hinojo. Una infusión de hinojo es muy adecuada contra las diarreas y trastornos digestivos (dispepsias) del lactante, como bebida durante los períodos de ayuno, (sea en el curso de una enfermedad o durante una cura de ayuno) y, aplicada externamente en forma de compresas, en inflamaciones de los párpados (blefaritis) o de la conjuntiva ocular (conjuntivitis). También se obtienen buenos resultados si se emplea el hinojo como expectorante en pediatría (medicina infantil).
ANÍS
El anís (Pimpinella anisum) es una planta olorosa de origen oriental y de 2 a 3 palmos de altura. En España constituye una importante planta de cultivo, llegando a ser nuestro país uno de sus principales productores. Para su buen desarrollo precisa ni demasiada humedad ni inviernos rigurosos, sino muchas horas de sol en un cielo sin nubes. Sus frutos llegan a contener de un 2 a 3% de aceites esenciales. Su acción carminativa es menor que la del hinojo y, . por supuesto, bastante menor que la de la alcaravea. Sin embargo, su acción expectorante es mayor que la de ambas plantas.
Por otra parte, su agradable sabor y fragante aroma constituye un factor a tener en cuenta en su empleo como planta acompañante cuando se pretende obtener en una combinación fitoterápica una determinada acción carminativa.
CILANTRO
Otra planta de acción moderadamente carminativa, pero que se usa más bien como condimento es el cilantro (Coriandrum sativum). Se emplean, al igual que en las otras plantas carminativas que hemos visto, sus frutos, de mayor tamaño y más redondeados que los de la alcaravea.