Baño integrado
Un diseño audaz
Este baño forma parte de la propia suite pero con una estrategia de separación material muy sutil, a través de un cabecero que ejerce de lavabo por su parte posterior, realizado en la misma madera de roble que se usa en el dormitorio. La ducha y los sanitarios se han revestido con materiales diferentes para crear cierta tensión visual en el conjunto.
Esta suite ha sido proyectada con cierta audacia para aprovechar el poco espacio existente que, obviamente, desembocaba en un lavabo de reducidas dimensiones y sensación de ahogo. Para ello se ha prescindido de la separación tradicional entre baño y dormitorio dejando que el mueble cabecero cumpla esta función, con el añadido de que este mismo mueble funciona como tal por el lado de la cama y como soporte para la encimera y el lavabo por el lado opuesto. Los dos espejos pivotantes que se levantan sobre la encimera funcionan como tales en su misión de ayudar a las tareas de higiene, pero se pueden colocar de perfil para hacer su presencia más liviana desde el dormitorio.
Tras este elemento estratégico que sirve de soporte y de división, se han colocado los sanitarios, convenientemente segregados del resto, y la gran ducha que ocupa un espacio rectangular y que se ha revestido con un interesante material a base de piedras de río, blancas conglomeradas, que le dan un aspecto natural, fresco y al mismo tiempo práctico. La continuidad visual del espacio se consigue utilizando como materia básica la madera de roble claro barnizada, en armonía con la tarima del suelo que cubre todo el dormitorio.
El tratamiento decorativo sigue
la estela racional de la casa
Armario doble realizado en DM lacado forrado de espejo según diseño de Molins Interiors. Inodoro con tanque a pared de Roca modelo Meridian en blanco con asiento de tapa con caída amortiguada. Bidé modelo Meridian de Roca con juego fijación en blanco y con tapa de caída amortiguada. Monomando para bidé modelo Cuatro Plus de Roca.
La continuidad visual se consigue
mediante la madera de roble
claro
Se ha prescindido de la separación tradicional entre baño y dormitorio
Este material casa admirablemente con la porcelana blanca de los sanitarios, con los frontales de cristal verde del armario e incluso con el revestimiento de piedras de río de la ducha. Una armonía cromática de colores suaves, del tostado al gris, que resulta especialmente agradable en este espacio. El tratamiento decorativo que se le ha dado sigue la estela racional del conjunto. Tonos neutros y materiales tan elegantes como resistentes definen un cuarto de aseo coordinado con el resto de la casa. El pavimento de parqué continúa desde las estancias de living hasta el vestidor, propiciando una visión lineal que une criterios. Los complementos textiles están coordinados con los tonos de la madera que se ha utilizado en los muebles y de esta forma todo el conjunto adquiere un aire homogéneo muy agradable.
La iluminación de esta pieza procede exclusivamente de las entradas de luz natural que disfruta el dormitorio. Para complementarla durante las horas de noche se ha encastrado una serie de focos en el techo, que se pueden orientar para facilitar la estancia y las tareas de higiene..