TU CARA ME SUENA

Un solo vistazo es suficiente y el móvil se desbloquea: el reconocimiento facial lo hace posible. Pero ¿qué esfuerzo se necesita para engañar a estos sistemas? En Computer Hoy hemos querido hacer la prueba.

El reconocimiento facial probablemente acabará sustituyendo en un futuro más o menos cercano, el desbloqueo de todo tipo de teléfonos. Con esta tecnología te puedes ahorrar el molesto PIN o eliminar de tus dispositivos el sensor de huellas. En lugar de ello, basta con echar un

vistazo al teléfono. Pero ¿es seguro este método? ¿Resulta fácil de engañar?

¿Será la cabeza falsa una especie de llave maestra?

Para averiguar si el reconocimiento facial se deja engañar ( y saber al mismo tiempo cuánto) se nos ocurrió una idea arriesgada, pero también el mejor modo de comprobarlo: reconstruir una cabeza de nuestro compañero Mathias Otten (de nuestra revista hermana Computer Bild). Antes de que se te ocurra imitarnos, es justo que te hagamos esta advertencia: si te estás pensando en hacer un busto similar para tu casa, debes contar con unos costes de unos 5.000 €. Y ahora, volvamos con la pregunta que queremos responder ¿Será posible engañar el reconocimiento facial con eso?

Con un escáner 3D Artec Eva que nos proporcionó KLIB, escaneamos a Mathias Otten con hasta 2 millones de puntos por segundo.

Un programa especial es el responsable de convertir las coordenadas individuales en un modelo 3D con superficie cerrada. Una vez finalizado el proceso se obtiene un modelo 3D. Ahora viene lo complicado: crear una cabeza a partir de estos datos. Una Ultimaker 3D imprime la cabeza artificial a partir de numerosas capas finas. Este proceso duró dos días.