Viaja (bien) y acertarás
Hazlo a menudo, búscate un local y no dejes ni rastro. Palabra del visionario Ross Borden.
“No ha habido un momento en la historia en el que haya sido más importante viajar que este. Para que los humanos sobrevivan en paz, con los enormes desafíos a los que tenemos que enfrentarnos –cambio climático, enfermedades, conservación de la naturaleza, radicalismo religioso–, ¿cuándo ha sido más crucial que cada uno de nosotros conozca y entienda a las personas de otros países, religiones y contextos? El viaje es el vehículo más poderoso para que seamos menos ignorantes sobre el mundo y su gente”. El norteamericano Ross Borden habla de lo que conoce: al terminar la universidad, ya había vivido en países como España, Kenia y Argentina y había viajado por otros 25. De su pasión exploradora nació en 2006 Matador Network, una plataforma para compartir historias de viajes y conectarse con otros viajeros, y también ha surgido su colaboración con la firma Dockers, que lo ha convertido en protagonista de su campaña de este otoño. La firma californiana de pantalones, que lanza esta temporada los chinos Supreme Flex, le siguió en dos viajes de trabajo (Berlín y Ciudad de México) y revisitó con él la Bahía de San Francisco, su ciudad natal.“Berlín es mi lugar preferido para la exploración urbana. Bares escondidos, extraños y divertidos lugares de fiesta... y está habitada por una joven ‘clase creativa’ que la mantiene fresca e interesante”, explica Borden. También es un apasionado de Ciudad de México
–“estoy obsesionado con la comida mexicana y el mezcal, así que es casi el paraíso en la Tierra”– y de su propia ciudad. “Tengo un niño de dos años y un perro, y vivimos a dos minutos de la playa, es perfecto. Cuando era más joven podía viajar sin parar y ser súper feliz. Hoy en día, irme más de una semana me parece demasiado. Echo de menos a mi hijo, a mi perro y mi propia cama. Mucha gente cree que se necesitan semanas para visitar otro país, pero a mí me encanta conocer destinos como Estambul o Melbourne en siete días”. Eso sí, la conexión con los locales es crucial y eso promueve desde su proyecto. “A muchos de mis amigos los he conocido en mis viajes. No hay nada mejor que alguien que te aguarda para enseñarte su ciudad”.
Borden es feliz conectado a la Pachamama, de ahí que, hoy por hoy, su ciudad favorita sea Ciudad del Cabo. “La naturaleza es muy especial, principalmente en Lion’s Head y alrededor de Table Mountain National Park”. Sobre las repercusiones medioambientales del turismo, reflexiona: “Podría argumentarse que viajar no es ecológico porque moverse en avión deja una huella de carbono, sin embargo, creo que es suficiente con respetar el lugar y a sus gentes. Trato de ser consciente de mi impacto como viajero pero, más allá de lo que hacemos como individuos, hay que recordar a otros sus efectos en el entorno. Las redes sociales han suscitado curiosidad sobre nuevas ciudades y el mundo natural, pero pueden ser peligrosas. Islandia, por ejemplo, se convirtió en uno de los destinos más populares en Instagram y ahora está invadido por turistas, muchos de los cuales no entienden o no les importan las consecuencias de dejar basura allí”.
Lo que está claro es que los millennials y la generación X (personas de entre 18 y 40 años) “se preocupan más por las experiencias que por lo material. Muchos viven en grandes ciudades, se casan y tienen hijos más tarde que sus padres y, a veces, no compran casa ni coche. No hay precedentes a su riqueza y gran parte se gasta en viajar”.