Condé Nast Traveler (Spain)

Nos buscaremos

- David Moralejo, director. @dmoralejo

El flechazo no solo fue instantáne­o, así debe ser cuando Cupido anda atinado: fue también masivo. Ni un corazón del equipo de Condé Nast Traveler se quedó frío ante la foto que ilustra la portada de este febrero, mes siempre un poco enamoradiz­o de más, siempre pasado de azúcar. Razones sobraban para lo contrario, para que la imagen nos dejase helados, una poética postal de Groenlandi­a, de acuerdo, pero tomada bajo un frío demoledor –un frío de anorak, palabra prestada del groenlandé­s–, con esos icebergs de lentísimo divagar salpicando el océano y una barca ahí, en mitad de la nada, que parece buscar algo... que parece buscarte a ti. El guiño a la canción de Los Zombies era obligado, qué hacer cuando no hay estribillo más romántico y trotamundo­s en todo el planeta pop: “Cruzando amplios mares, escalando altas montañas, descendien­do los glaciares, a través de desiertos, las junglas y los bosques quizá te encuentre alguna vez”. El amor, que nos derrite.

Más allá de dobles sentidos, la fascinació­n por tierras remotas – que tanto enardece en estos días de mantas, crepitares y planes de ida y vuelta– nos ha puesto de acuerdo incluso con nuestros compañeros de The New York Times, que también han visto en Groenlandi­a ese viaje a los sueños polares –ahí va otro guiño para melómanos pop– aún por descubrir. Pero ay, el siempre épico afán explorador oculta un reverso tenebroso y menos fotogénico: Groenlandi­a se derrite a toda velocidad; su hielo se escapa a través de una colosal fuga que, claro está, hemos perpetrado nosotros, los humanos. Y es ahí donde entra en escena Ray Bradbury – quien me conoce sabe que lo saco de bambalinas más que Shakespear­e a los remordimie­ntos–, porque en Crónicas Marcianas ya nos advirtió de la vocación destructor­a de una humanidad a la conquista de Marte: We earth men have a talent for ruining big, beautiful things (“Nosotros, los terrícolas, tenemos un don para arruinar las cosas más grandes y hermosas”). Bofetón de distopía que hoy torna en rotunda realidad porque, como bien sabía Bradbury, al final todo pasa. Vaya si pasa.

Esa melancolía bradburyan­a que tan bien nos sirve para aprender a ser viajeros consciente­s atrapó a nuestro fotógrafo, Niko Tsarev, quien nos contó que la vida a ras del Ártico “es extremadam­ente severa: los lugareños rara vez llegan a los 50 años, las casas se rompen debido al permafrost e incluso los huesos intentan escapar del cementerio cada primavera con el deshielo. Todo te invita a pensar que no necesitas estar ahí. Pero estás... y te gusta”.

Tanto como nos gusta a nosotros buscarte en todas partes, en cualquier otra parte. Y eso hemos hecho: en los riscos de Islandia con Cecilia Díaz Betz, fotógrafa que ve a Malevich donde otros solo ven nieve, ese “arte de ver las cosas” que defendía John Burroughs; en las ganas, las de todos, de jugar a la pelota vasca en Idaho, porque fue allí, en Boise, donde recalaron decenas de euskaldune­s a comienzos del siglo XX y aún hoy mantienen costumbres y montones de apellidos. También en Stavanger, entre madera y diseño; en los bosques de Tohoku y hasta en un palacio de Rajastán con príncipe incluido, no es un cuento. El final feliz ya es cosa tuya. Nuestra. Viajemos mucho, pero consciente­s.

 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??
 ??  ?? CRÓNICAS MARCIANAS RAY BRADBURY, ED. MINOTAURO
CRÓNICAS MARCIANAS RAY BRADBURY, ED. MINOTAURO
 ??  ?? FEIRA DE VELHARIAS ESTREMOZ
FEIRA DE VELHARIAS ESTREMOZ
 ??  ?? METRO RÉPUBLIQUE PARÍS
METRO RÉPUBLIQUE PARÍS
 ??  ?? LA RESTINGA EL HIERRO
LA RESTINGA EL HIERRO

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain