POR LOS CERROS DE...
Úbeda Es curioso cómo hace unos años solo pensaba en esfumarme del pueblo y no mirar atrás. Ahora solo espero el momento en el que tenga mi vida plenamente cerrada para volver. Y esta vez para quedarme. Me imagino poder trabajar a distancia a la luz del sol, esa que llega directa a mi balcón por encima de San Isidoro. Quién sabe, tal vez esa perfecta aleación entre calma, arte y naturaleza que reúne Úbeda me daría las fuerzas necesarias para por fin escribir un libro. El mar de olivos y la historia del casco antiguo serían ingredientes suficientes para la inspiración. Puede que parezca que hablo en sueños... pero no descarto cumplirlos. Cuántas veces anhelamos todo aquello de lo que antes huíamos (en la imagen, Cortijo Montano, una preciosa casa rural a pocos kilómetros de Úbeda, rodeada de olivos y junto al Guadalquivir, cortijomontano.com)