Sigue al conejo blanco
Y disfutarás de una estancia de lo más british en Cowley Manor Experimental, la casa de campo donde Lewis Carroll creó a su célebre Alicia.
Cuentan que Alice Lidell, la niña que inspiró Alicia en el país de las mara
villas y Alicia a través del espejo, vio un conejo blanco meterse por un agujero en los jardines que rodean Cowely Manor. Se encontraba en la compañía (hoy ensombrecida por cierta controversia) de Lewis Carroll y sí, aquí fue donde se gestó aquella célebre obra de la literatura. Desde el verano pasado, esta casona de tres siglos de antigüedad en los Cotswolds funciona como hotel bajo el manto de Experimental Group y, tal vez no te regale una visión semejante, pero sin duda escucharás en sus 22 fragantes hectáreas los cantos de pájaros carpinteros, reyezuelos y alcedinos mientras paseas entre sus manantiales, fuentes y estanques custodiados por secuoyas, cipreses y estatuas de águilas y leones de piedra. La interiorista Dorothée Meilichzon y el estudio de arquitectura De Matos Ryan han sacado partido a las acogedoras estancias con detalles de fantasía como camas con dosel, alfombras que imitan un tablero de ajedrez y hasta una pequeña puerta oculta para el Conejo Blanco. ¿Alguien ha dicho “¡Hora de tomar el té!”? Hazlo en el restaurante liderado por el chef Jackson Boxer, quien también sirve almuerzos y cenas a huéspedes y visitantes. Los platos de su carta están elaborados con ingredientes locales y recogen recetas francesas como el côte de boeuf con cebolletas cosechadas del huerto. El epílogo de bienestar a tu aventura campestre lo pone el galardonado spa C-Side, en un edificio posmoderno flanqueado por dos piscinas climatizadas, una interior y otra exterior, cuyos tratamientos se basan en la filosofía de la firma vegana Monu Skin (desde 288€, con desayuno y acceso al spa; experimentalgroup.com).