CONSO DOMÍNGUEZ
La Fundación Promi surgió en Cabra en los años 70 con la intención de trabajar, desinteresadamente a favor de los más necesitados y marginados de la sociedad de entonces, las personas con discapacidad psíquica, con la finalidad de lograr su integración social y laboral.
Impulsada por Juan Pérez Marín, doctor en Medicina y Cirugía, en estos más de 45 años al servicio de las personas con discapacidad intelectual, Promi se ha ido adaptando a las necesidades del colectivo tanto en oferta de servicios como en adecuación de sus infraestructuras y dotación de los medios humanos y materiales necesarios para desarrollar su actividad. Siempre con el objetivo de contribuir a mejorar la calidad de vida del colectivo al que atiende y sin perder la vocación de servicio, esfuerzo, entrega y enfoque hacia las necesidades de las personas en situación de dependencia y menores.
El crecimiento tanto en profesionales, programas, servicios prestados e instalaciones ha sido constante a lo largo de las décadas y ha estado encaminado a cumplir la visión de Promi que se concreta en «ser una organización social referente por su implicación en el desarrollo integral de las personas y su inclusión, apostando por la excelencia y sostenibilidad ambiental en la gestión de nuestros servicios».
El principal reto de esta actividad, tras el bienestar del colectivo es su inclusión en la sociedad.
La Fundación Promi se encuentra inmersa en el desarrollo de su III plan estratégico que entre 2018 y 2020 pretende desarrollar una serie de ejes que van desde la elaboración de un código ético a aumentar la formación y establecer alianzas que posibiliten el intercambio de experiencias que lleven al crecimiento del compromiso con las personas usuarias. La mejora continua del servicio y la apertura a las nuevas líneas de investigación también forman parte de este plan estratégico.
Tras una expansión nacional en los años 90, tras el recorte en los fondos europeos, la labor de Promi se circunscribe, en la ac
tualidad, a la provincia cordobesa. Las mejoras en los servicios prestados a los usuarios incluyen la puesta en marcha de una unidad de atención infantil temprana en 2016 y la ampliación en nueve plazas de la residencia de psicodeficientes de Villanueva el último año.
Promi gestiona doce centros propios y uno convenido, con el Ayuntamiento de Carcabuey. La mayoría de sus plazas están concertadas con la Junta de Andalucía. Además, cuenta con un centro privado de formación profesional en Córdoba y un centro para la atención de temprana en Cabra.
Cuenta con una plantilla que oscila entre las 250 y los 280 trabajadores, la mayoría de los cuales presta servicios directamente relacionados con la atención a la dependencia.
Presta servicios asistenciales en centros de atención especializada para personas con discapacidad intelectual y personas dependientes, en régimen de internado o de estancia diurna con terapia ocupacional; y formativos, con la impartición de ciclos de grado medio y superior.
También de atención infantil temprana, un servicio ambulatorio destinado a una población infantil de entre 0 a 6 años que presentan un trastorno en su desarrollo o tienen riesgo de padecerlo, a su familia y entorno.
Por último se dedica a otras actividades como catering, lavandería, jardinería, recogida de cartón y plástico, que les ofrece fondos para su gestión.