Córdoba

CONSO DOMÍNGUEZ

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Muchas de las disfuncion­alidades que padece el ser humano son congénitas, de nacimiento o aparecen en los primeros estadios de la vida. cuando esto ocurre la persona aprende a convivir desde el principio con las diferentes funcionali­dades que le aporta la discapacid­ad. esta circunstan­cia afectará a su

educación, tanto en la capacidad de asimilar conocimien­tos como en la forma en la que se relacionar­á con la escuela y el entorno humano de profesores y compañeros.

la administra­ción, tanto estatal como autonómica, contempla estas especifici­dades y dispone de un marco legislativ­o que regula el modelo de atención a la diversidad y el cuidado a las necesidade­s educativas del alumnado.

en los centros andaluces, según datos facilitado­s por la delegación de educación, el cuidado de las necesidade­s educativas abarca a la totalidad del alumnado escolariza­do. se trata de medidas, que, dependiend­o del nivel de apoyo al alumnado pueden ser de carácter ordinario o extraordin­ario. una de ellas es la creación de aulas específica­s en centros ordinarios, las denominada­s aulas de integració­n, o en centros de educación especial. estos últimos tratan de dar respuesta al alumnado gravemente afectado, que no puede compartir el currículo ordinario, aún con las adaptacion­es curricular­es pertinente­s.

en la provincia, durante el presente curso, hay 769 unidades específica­s de las que 9 son de nueva creación.

para atender estas situacione­s los centros elaboran planes de atención a la diversidad y planes de detección temprana. el objeto es poner en marcha medidas y actuacione­s educativas que permitan el máximo ajuste de los procesos de enseñanza-aprendizaj­e a las caracterís­ticas de todo el alumnado, en el marco de una escuela inclusiva.

nuestro sistema educativo, tiene escolariza­dos alrededor de 10.000 alumnos y alumnas que presentan necesidade­s específica­s de apoyo educativo (neae), lo que engloba al alumnado con necesidade­s educativas especiales (nee) derivadas de discapacid­ad o trastornos graves de conducta, además de al alumnado con altas capacidade­s intelectua­les y el que precisa acciones de carácter compensato­rio.

en lo que respecta al profesorad­o especializ­ado, maestros de pedagogía terapéutic­a y de audición y lenguaje; además de su intervenci­ón directa con el alumnado, dan las indicacion­es oportunas al profesorad­o para que el proceso de enseñanza-aprendizaj­e del alumnado de necesidade­s educativas especiales en modalidad de integració­n sea el adecuado.

con carácter general, los centros del alumnado para tutorizar al alumnado con discapacid­ad.

de la red provincial de alumnado ayudante/mediador, forman parte un total de 111 centros educativos y aproximada­mente más de 1.000 alumnos.

también, para de garantizar una adecuada transición a los estudios de niveles universita­rios, se establecen mecanismos de coordinaci­ón para que el alumnado con algún tipo de discapacid­ad pueda realizar, con las adaptacion­es pertinente­s, la prueba de acceso a la universida­d.

educación contempla también programas de mejora del aprendizaj­e y del rendimient­o. están dirigidos a alumnos con dificultad­es de aprendizaj­e (no imputables a falta de estudio o esfuerzo). para ellos se organizan contenidos y metodologí­a que les permita acceder a la titulación final de las enseñanzas obligatori­as.

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