Sánchez y Feijóo recrudecen su duelo y pasan al ataque personal
▶ La reforma del Código Penal centra el choque dialéctico en el Senado ▶ El presidente promete seguir trabajando por la convivencia
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, el primero en intervenir ayer en la sesión de control del Senado al Gobierno, dijo al presidente, Pedro Sánchez: «El Gobierno está en shock; los daños para usted son irreparables». Añadió que no hay institución que no tenga ya el «barniz de la indignidad» que el mandatario socialista pone en cada lugar que toca. «El clima que está generando es irrespirable», concluyó antes de enfatizar que si el Ejecutivo sigue, es por su «ansia de poder».
Sánchez, en respuesta, acusó al máximo responsable del PP del bloqueo sin fin del Consejo General del Poder Judicial, y por tanto, de que la Constitución esté lesionada. «Antes de dar lecciones de constitucionalismo, cumpla la Constitución, y antes de dar lecciones de higiene, vengan lavados», entonó. Lo mejor de este tramo suyo del debate fue, sin embargo, el pasaje con el que reaccionó a la dureza del líder popular. «¿Dónde ha dejado su moderación? ¿En objetos perdidos junto a su autonomía política?».
En la réplica, Feijóo subió el tono. Tras recalcar que es el presidente de un «Gobierno en llamas», le recriminó: «Usted no tiene límites; España, sí. Nunca nuestro país tuvo un Gobierno así. Ojalá podamos hacerle una moción de censura, pero sepa que la próxima vez que nos veamos en el Congreso será en mi investidura».
MOCIÓN DE CENSURA ⁄ ⁄ No obstante, Feijóo retó a su homólogo del PSOE a verse las caras en la moción de censura que a su entender serán las autonómicas y municipales del 28-M. «La moción de censura se hará en miles de urnas en miles de ayuntamientos. La sacaremos adelante para empezar a pasar página de la pesadilla más grande que ha tenido España gracias a su Gobierno».
Sánchez vio el órdago y mostró dos aperturas diferentes de el diario El Mundo. Así se refirió a la primera de ellas: «Nos hemos desayunado con una portada bastante interesante que explica por qué el tono bronco del señor Feijóo [...]. No hay más que leer los medios conservadores para saber qué va a decir». Con ello incidió en la idea de que el líder del PP es manejado por poderes empresariales y mediáticos.
Ninguno citó la ley del solo sí es sí por su nombre, pero flotó en el ambiente. Ambiente enrarecido y áspero. El presidente criticó al PP porque no tiene sentido, a su juicio, salir en defensa de los derechos de las mujeres al mismo tiempo que pacta con Vox gobiernos autonómicos como el de Castilla y León. En su opinión, la formación de Santiago Abascal «banaliza» la violencia machista, con la que además «frivoliza». Como colofón, recalcó: «No les preocupa lo más mínimo los derechos de las mujeres», dijo.
Desde que se conoció que hay jueces que, en aplicación de la ley del solo sí es sí, están rebajando las penas de los condenador por delitos sexuales, se ha generado «alarma social», en palabras de Irene Montero. Pero la crisis abierta en el Gobierno al respeto, para Feijóo, «no es lo peor». «Lo peor es que dirige un Gobierno que ha negociado el Código Penal con aquellos que delinquieron contra la integridad territorial mientras se excarcelan a agresores sexuales».
La reforma del delito de sedición, previa modificación de la ley orgánica del Código Penal, delimitó el campo de juego en el que Sánchez quería desplegar su argumentación. Tras vanagloriarse de las medidas aprobadas ayer en el Consejo de Ministros para ayudar a un millón de familias con problemas para pagar la hipoteca, el presidente abanderó «la convivencia» porque, añadió, «uno de los graves problemas» de la anterior legislatura fue precisamente ese.
En palabras de Sánchez, Mariano Rajoy, cuando en Catalunya se fueron sucediendo leyes de desconexión y declaraciones de independencia, «no hizo nada». Y cuando lo hizo, actuó primero con la creación de «una policía mal llamada patriótica» y luego con la aplicación del artículo 155 de la Constitución, que el PSOE en la oposición apoyó. El presidente no encuentra ahora el apoyo del PP, algo que afeó: «Estuvimos con ustedes y ustedes no están con nosotros porque no les interesa solucionar el problema de Catalunya. Solo quieren confrontar territorios para arañar votos en el resto de España». En contraposición, señaló su política de pacificación y convivencia porque «la Catalunya de 2022 y la España de 2022 son mejores que la de 2017».
Quizá lo que les pasa a Sánchez y a Feijóo para dedicarse tan beligerantes palabras es que sus asesores les están contando que van a ganar las municipales y las generales. El líder del PP directamente habló de su debate de investidura. Pero el presidente del Gobierno no comparte semejante vaticinio y le dijo a Josep Lluís Cleries, de Junts: «Ya sé en qué están ustedes: en ver si en 2023 suena la flauta y el PP gobierna y tienen la oportunidad de volver al victimismo. No va a pasar».
Tanto el líder del PSOE como el del PP se ven ganadores en las elecciones
«No les preocupan los derechos de las mujeres», dice el presidente Sánchez