Rafa Nadal estrena casa en Mallorca en primavera
Las obras de su mansión en Porto Cristo están muy avanzadas
La nueva casa en Mallorca de Rafa Nadal y Mery Perelló afronta su recta final. Está ubicada en la parte más elevada de Porto Cristo, en el municipio de Manacor, y con unas privilegiadas vistas panorámicas a toda la ensenada natural del puerto, desde la bocana al Club Nàutic y la playa al perfil del casco urbano, con la fachada principal de la iglesia y su campanario al fondo, sin interrupción.
Después de dos años y medio desde que el proyecto obtuvo la licencia, los obras ya se encuentran muy avanzadas, con la construcción de los exteriores casi totalmente concluidos y en fase de acabados, instalaciones y equipamientos, lo que permitirá al tenista de Manacor y a su esposa, que fueron padres por primera vez el pasado 8 de octubre, estrenar la nueva vivienda en primavera, en mayo de 2023, si no hay contratiempos y se cumplen los 36 meses de plazo de ejecución de la obra.
Esta recta final de los trabajos mantiene en estos momentos a un gran número de albañiles, técnicos e instaladores trabajando al mismo tiempo en la obra durante los días laborables, lo que en el panorama otoñal de tranquilidad absoluta de Porto Cristo convierte la construcción en la único fuente de ruido que se escucha en la primera línea del núcleo costero, junto al rumor del mar.
El proyecto, redactado por el arquitecto mallorquín Bartomeu Esteva, hijo del aparejador Antoni Esteva, fundador de un despacho con una destacada trayectoria, y hermano de la diseñadora Cortana, levanta dos cuerpos de edificios interconectados de planta baja y dos alturas, ambos rematados
con una cubierta a cuatro aguas de amplios voladizos, que protege las espaciosas terrazas de la primera y la segunda planta, donde se abren grandes ventanales, que ya han sido instados. El tratamiento de las fachadas combina una tonalidad gris pálida con el mármol, también gris pero más oscuro y con una pátina mucho más brillante como elemento de contraste.
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GRAN PINO Y PALMERAS Una tercera edificación desarrollada en una sola planta y situada, algo apartada de los dos edificios descritos, junto a la piscina, completa el conjunto, rodeado de una zona de jardín, todavía no desarrollada, donde destacan un gran pino junto a la fachada principal, vestigio del bosque que hubo en la zona antes de su desarrollo urbanístico, y un conjunto de palmeras que rodean toda la construcción, que
también cuenta con una planta sótano. El acceso a la nueva casa del tenista mallorquín se realiza a pie de calle, en una zona de Porto Cristo donde al mismo tiempo se están construyendo otras viviendas unifamiliares de gran lujo.
La terraza de la segunda planta es más abierta y luminosa. La de la primera, en cambio, queda protegida por unos módulos rectagulares que ensanchan el edificio en la base y crean espacios resguardados de la intemperie en el exterior. Al pie de las dos edificaciones, muros de piedra vista que se
desarrollan a modo de bancales sirven de nexo de unión entre los dos edificios principales y rematan la base del conjunto, como nexo de unión con el talud de roca sobre el que se levanta la casa.
Al pie de la fachada principal de la nueva casa de Rafa Nadal y Mery Perelló hay un acceso al mar entre las rocas, con una estrecha escalera que conduce a la entrada de la Cova des Correu. Se trata de una zona con un gran valor sentimental y familiar para Rafa Nadal, el paisaje que une su infancia y su madurez, su territorio más personal e íntimo.
Su abuelo, el músico Rafael Nadal, fue propietario de un edificio ubicado casi al lado del solar donde levanta su nueva casa. Y su propio tío, el exfutbolista Miquel Àngel Nadal, leyenda del Real Mallorca y del Fútbol Club Barcelona, adquirió una casa en el extremo de la bahía.