LA FÓRMULA DE LA ALEGRÍA.
MIENTRAS QUE LOS CONOCIMIENTOS Y LAS HABILIDADES SUMAN EN TU VIDA, LA ACTITUD MULTIPLICA. Y ATENCIÓN: CAMBIARLA DEPENDE SÓLO DE TI. EMPIEZA A PRACTICAR HOY MISMO.
La actitud es lo más importante.
Todos somos bombillas con patas. Pero, mientras algunos van por la vida a 30.000 vatios, otros van tristes y fundidos». Esta es una de las reflexiones que Victor Küppers dejó sobre la mesa durante la charla que pronunció recientemente en la Clínica Dermatológica Internacional de Madrid, un centro cuya filosofía es que una sonrisa puede embellecer más que una cirugía estética. Küppers, doctor en Humanidades y conferenciante, desveló la fórmula que define el valor de una persona: v=(c+h)xa. Aunque suene a matemáticas de nivel avanzado, tiene una fácil explicación: la c se refiere a los conocimientos, la h a las habilidades y la a es la actitud. «La c y la h suman, pero la a multiplica», señala. En otras palabras: los conocimientos y las habilidades te abren puertas, pero la buena actitud cuenta más porque te da alegría y te garantiza el cariño de quienes te rodean. ¿Te animas a poner en práctica esta fórmula? Sigue estos consejos y notarás el cambio, ya que, como asegura el experto, «cuando uno intenta elegir la mejor actitud, la vida se vuelve apasionante».
SAL DEL BUCLE
¿Te pasas el día dando vueltas a todo aquello que te hace infeliz? Ha llegado la hora de salir del bucle y actuar. «Divide tus problemas en dos categorías: dramas y circunstancias a resolver», aconseja Küppers. Mantener una actitud alegre cuando se sufre un auténtico drama (como la muerte de un ser querido a una edad temprana) es muy complicado, pero, sé sincera, ¿lo que a ti te quita el sueño es algo tan grave? ¿No? Entonces te hallas ante una circunstancia a resolver y debes relativizar. «Existe el derecho al desahogo, pero tiene que ser razonable. Y luego hay que aceptar las cosas como son», apunta.
AGRADECE
Pregúntate qué cosas fantásticas hay en tu vida. ¿Un trabajo que te encanta? ¿Una pareja que te cuida y te respeta? ¿Una excelente relación con tus padres? ¿Unos hermanos a los que adoras? Pues aquí viene la gran noticia: eso es algo de lo que no todo el mundo disfruta, así que deberías estar gritando gracias a los cuatro vientos. «No des por hecho lo bueno que tienes. Según un estudio, lo más importante con lo que contamos son nuestros padres, hermanos, hijos, pareja y amigos», subraya Küppers. «La gran incoherencia del ser humano es que nos damos cuenta de lo que realmente es importante cuando lo perdemos. Vamos como pollos sin cabeza hasta que la vida nos da un golpe». Grábate esas palabras a fuego y aprende a ser agradecida... o puede que algún día te arrepientas de no haber sabido valorar tu suerte.
ILUSIÓNATE
«Una persona con ilusiones es alguien alegre», sostiene el experto. Si quieres sentirte bien, no hay nada más efectivo que elaborar una lista de tareas ilusionantes e ir a por ellas. «Por ejemplo, invéntate una fiesta; cualquier motivo es bueno, todo puede celebrarse. Búscate ilusiones, es tu responsabilidad cuidar de tu estado de ánimo. Al fin y al cabo, no es una cuestión de dinero, sino de mentalidad, de cambio de chip», insiste.
FINGE
El cardiólogo Valentín Fuster señaló en cierta ocasión que aquel que no sufra un drama y aun así viva sin alegría se ha conformado con la mediocridad. Pero, ¿qué pasa si tu carácter no es alegre, si has nacido un tanto ceniza? Victor Küppers recomienda... fingir. «El gran truco para configurar los hábitos de tu carácter es este: “Haz como si... hasta que lo seas”. Por ejemplo, si no eres amable, ve por la vida como si lo fueras y, al final, lo serás». Es como aprender a conducir: al principio es forzado y con el tiempo acaba saliendo solo.
«EXISTE EL DERECHO AL DESAHOGO, PERO DEBE SER RAZONABLE. DESPUÉS HAY QUE ACEPTAR LAS COSAS SOMO SON» (KÜPPERS)