ASÍ ENCONTRARÁS TU ‘ÁNGEL DE LA GUARDA’
NO ES LABOR SENCILLA, PERO DA BUENOS RESULTADOS.
1 POR DÓNDE EMPEZAR DEFINE TU OBJETIVO
«Identifca tus necesidades», recomienda el director de la Red de Mentoring de España Julio Rodríguez. Debes tener claro cuáles son tus metas profesionales a corto o largo plazo, tus fortalezas y debilidades… Y para eso, como reconoce la experta Pilar Jericó, «hay que partir de la humildad».
BUSCA EL PERFIL IDÓNEO
Algunos seniors no son buenos para esta tarea. Lo ideal es que «hayan recorrido el mismo camino que tú deseas hacer», dice Rodríguez, que sugiere buscar aquellos con «más experiencia en las preguntas que nos hacemos». Para ello, utiliza las redes o Google, y pregunta a quien haga falta.
FÍJATE EN TU ENTORNO
No tiene por qué ser una persona inalcanzable. Como asegura la doctora en Educación Begoña Ladrón de Guevara, puedes «recurrir a alguien de tu pasado con quien tengas feeling, con quien hayas mantenido una relación profesional o que haya estudiado en la misma universidad que tú».
2 CÓMO CONTACTAR CUESTIÓN DE TACTO
«Es poco aconsejable salir a la calle y decir: “Busco un mentor”», afrma Ladrón de Guevara. Tampoco deberías pedir directamente a alguien que sea tu ángel, porque «eso asusta», apunta Julio Rodríguez. Quizás, en un primer contacto, es sufciente con hacerle ver que compartís inquietudes.
PROPONLE UNA REUNIÓN
Lo mejor es no andarse con ambigüedades y «echarle algo de cara», como dice Ladrón de Guevara, y comentarle al posible mentor que conoces su trayectoria y por eso quieres hablar con él. «Para empezar, solicita una breve entrevista de unos 20 minutos», precisa Julio Rodríguez.
DEJA CLAROS TUS PROPÓSITOS
Se trata de mucho más que de un simple consejo. Por este motivo, debes localizar «un candidato que te inspire confanza, que de verdad esté capacitado para realizar ese trabajo y que se lo tome muy en serio», indica Ladrón de Guevara. No lo olvides nunca: lo que está en juego es tu futuro.
3 CLAVES PARA MANTENERLO CADA CONSEJO ES UN LOGRO
Una vez que has fchado a tu protector, no pienses que está obligado a una relación sin fn. Como apunta Julio Rodríguez, «el derecho a seguir hablando con quien te puede ayudar de forma desinteresada debes ganártelo partido a partido, conversación a conversación».
«Es una relación de dos, de la que ambos han de ganar» –apunta el experto–. El mentor también se benefcia de la creatividad y de la energía del mentorizado, se siente reconocido por sus capacidades como consejero, descubre temas de actualidad y se obliga a hacerse nuevas preguntas».
CUESTIÓN DE RECIPROCIDAD SÉ AGRADECIDA
No olvides que el mentoring es «un proceso en el que se aprende una barbaridad», como constanta Pilar Jericó. Así que resulta obligado dar las gracias a «quien nos comparte su experiencia y vivencia con el propósito de hacernos crecer», explica Julio Rodríguez. Y lo hace sin pedir nada a cambio.