SACA PARTIDO A LA ENVIDIA
Tener celos de otras personas no es malo, siempre que haya un componente de admiración. A veces, incluso, puede servirte para motivarte y mejorar. Sigue estos consejos.
ANALIZA TUS SENSACIONES
«Las emociones negativas surgen cuando alguien consigue algo que nos parece importante y que no poseemos», explica Judith Wright, experta en relaciones. Así que tómatelas como advertencias de aquellas cosas que faltan en tu vida. Crear una lista de lo que codicias hará que te sientas un poquito mejor.
MÁRCATE RETOS
Una vez que hayas identifcado tus deseos, pasa a la acción para hacerlos realidad. «En lugar de dejar que el éxito ajeno te desanime, es más inteligente utilizarlo como inspiración», cuenta Wright. Si, por ejemplo, quieres tener más seguridad en ti misma cuando intervienes en las reuniones, contrata a un coach. ¿Te gustaría ser mejor jefa? Infórmate de si tu empresa ofrece cursos de liderazgo.
NO PIERDAS EL RUMBO
Es normal que te desanimes cuando no consigues a la primera lo que te has propuesto, pero es esencial que no pierdas la perspectiva y no te desvíes de tus objetivos. «Recuerda que para colmar un anhelo no siempre es necesario dar pasos de gigante o realizar cambios radicales», comenta Judith Wright. A veces, es más útil ir haciendo pequeñas cosas y avanzar poco a poco». Mientras, si ves a la persona a la que envidias exhibiendo su vida perfecta, respira hondo y recuérdate que pronto también tú tendrás lo que quieres.