RESPUESTAS
1. FALSO Algunas de las enfermedades de transmisión sexual más comunes no muestran ningún tipo de síntoma en sus inicios, como la clamidia o la gonorrea. Una persona puede estar infectada durante semanas o meses sin saberlo.
2. FALSO Es un error bastante corriente. Sin embargo, no es así. Es más, lavarte de manera muy agresiva puede alterar tu flora vaginal protectora y abrir la puerta a las infecciones. 3. VERDADERO Puede cumplirse si tu pareja tiene un herpes labial (o está a punto de un brote) y tienes sexo oral. El herpes genital es causado por el VHS–2 y el labial por el VHS–1, pero ambos tipos pueden ser trasmitidos de la boca a los genitales y viceversa. La clamidia y la gonorrea pueden pasarse también de esta manera. Las prevendrás si usas condones o barreras bucales para el sexo oral. 4. VERDADERO Es cierto que los profilácticos bloquean la transmisión de los fluidos corporales, pero no eliminan el contacto piel con piel. Las células cutáneas infectadas –especialmente aquellas que llevan herpes y virus del papiloma humano– pueden ser contagiadas durante cualquier tipo de contacto sexual. Pero que ni se te pase por la cabeza abandonar los condones: son la mejor defensa contra muchas patologías y embarazos no deseados.
5. FALSO La mayoría de las ITS son completamente curables. Por ejemplo, se puede acabar con la sífilis, la gonorrea y la clamidia simplemente con una dosis de antibióticos. Ahora bien, el virus del papiloma humano, la hepatitis B y el herpes pueden ser crónicos –aunque perfectamente manejables, según los expertos–. Hoy en día, ni siquiera el VIH tiene por qué tener consecuencias fatales. El punto crítico para todas las ITS es detectarlas pronto (ante la más mínima duda, hazte un análisis de sangre). Algunas de las más fáciles de erradicar pueden acabar en complicaciones si no se tratan a tiempo.