SOBREVIVIR A UNA MUDANZA.
RECOGERLO TODO, DESHACER CAJAS… TE DAMOS LOS ‘TIPS’ PARA QUE CAMBIAR DE CASA SEA LO MÁS SENCILLO Y MENOS CAÓTICO POSIBLE.
Ideas para organizarte.
En los últimos cinco años he cambiado cinco veces de casa. Una mudanza al año. La primera fue un caos, pero la última me resultó sencilla… ¡y hasta divertida! Soy lo que se dice una experta en estas lides. En España, la gente se muda más en los meses de junio, julio y septiembre. Si es tu caso, debes tener en cuenta varias cosas. Según Habitissimo, portal especializado en reformas, el precio que se paga por el traslado está entre los 125 y los 600 euros. Depende de varios factores y, sobre todo, de si quieres que te embalen hasta el último libro o si prefieres ocuparte tú de ciertas tareas. Sea como sea, lo más importante es el orden y estar bien pertrechada de cinta de embalar, cajas y paciencia. ¿Algunos consejos rápidos? Organízate según se acerca el día señalado. Ve consumiendo los alimentos que tengas en casa, para no tirar comida, y desenchufa el frigorífico 24 horas antes. Recopila tus últimas facturas de electricidad, gas, agua y teléfono y avisa para que desconecten el servicio. También asegúrate de que las compañías de suministro te han dado el alta en tu nuevo domicilio, y no te olvides del wifi. Déjate de despedidas hasta las tantas recordando los mejores momentos y acuéstate temprano la noche anterior porque, por mucho que organices, será una locura, aunque si sigues nuestros tips, reducirás el caos en lo posible. Palabra de gurú.
¿PREPARADA PARA TIRAR?
Separa tus pertenencias en montones (a lo Marie Kondo) y trata de ser superhonesta: ¿te vas a volver a poner eso?, ¿releerás los libros? Con lo que decidas que no te sirve, invita a tus amigos a una merienda-mercadillo el día de la mudanza para que escojan lo que les guste y te ayuden a bajar cajas: quid pro quo, que diría Hannibal Lecter. Lo que sobre véndelo en Wallapop o similares, o regálalo a una ONG si crees que es útil.
CONSIGUE CAJAS GRATIS
Pregunta en tu supermercado si regalan cajas de cartón porque en muchos suelen hacerlo. Así ahorrarás dinero y reciclarás. En Mercadona, por ejemplo, las suelen dar sobre las 12.00 horas en la zona de la panadería. Y si se las pides el día antes, incluso te las guardan.
DALE A LA ESCRITURA
Anota con un rotulador de punta gruesa en mayúsculas (se lee mejor) qué lleva cada paquete y, si lo tienes claro, pon también a qué habitación irá destinado. Ahorrarás tiempo cuando tu casa esté okupada por los bultos.
PROTEGE LO FRÁGIL Y HÚMEDO
Envuelve tus platos, vasos y cualquier otro objeto que pueda romperse con plástico de burbujas, periódicos o revistas viejas. Tus cosméticos y productos de baño deben ir sellados en bolsas herméticas (de congelados o sándwiches). Así evitarás desagradables sorpresas húmedas.
PIDE DÍAS LIBRES EN EL TRABAJO
Algunos convenios colectivos conceden días por mudanza. Consulta en tu empresa si a ti te corresponden. Eso sí, avisa con tiempo, como establece el Estatuto de los Trabajadores.
COMPENSA EL PESO DE LA CAJA
Como diría un maestro zen, en el equilibrio se halla la perfección. Recuérdalo al hacer las cajas. Coloca lo más pesado al fondo, por ejemplo tus libros, y compensa con cosas ligeras como sábanas, ropa, adornos… Comprueba el peso para no pasarte. Tu espalda lo agradecerá.
LA IMPORTANCIA DEL CARRITO
De todos los complementos necesarios para una mudanza, un carrito con ruedas es el más importante. Hará que cargar los bultos sea más fácil, rápido y te evitará las temidas agujetas. Si no conoces a nadie que pueda dejártelo, pasea por tu nuevo barrio y pídelo prestado en una tienda (los fruteros suelen tener). Luego hazte clienta habitual de quien te lo preste, se lo merece: podrás comprobarlo.
LA SOLUCIÓN ‘LOW COST’
Lo más económico es que hagas tú misma la mudanza, pero si no tienes tiempo y cuentas con algo (poco) de dinero puedes optar por buscar en páginas tipo Mil Anuncios un servicio de portes económicos. Luego regatea para ajustar la tarifa. Pero ojo, cierra el precio antes y estate encima el día marcado para que lo barato no salga caro.
TRUCOS VARIOS PARA LA ROPA
Una amiga me contó que lleva la ropa en las perchas y las apila en el maletero del coche, intentando que se arrugue lo menos posible. Luego, las saca y las cuelga directamente en el armario. Lo probé en mi último traslado y… ¡funciona! Otra chica me dio un consejo impagable: preparar una bolsa con los imprescindibles y un par de mudas. Así no te vuelves loca buscando tus cosas los primeros días.