EL EFECTO NARCISO.
EL ‘YOÍSMO’ CAMPA A SUS ANCHAS EN EL SIGLO XXI, HACIENDO CREER A MUCHOS QUE SON EL CENTRO DEL UNIVERSO. SI TU PAREJA SE MIRA EL OMBLIGO, ¡CUIDADO!, QUIZÁ NO TE CONVENGA ESTAR A SU LADO.
¿Está más enamorado de él mismo que de ti?
En la era del egocentrismo, los narcisistas están a la orden del día y la probabilidad de enamorarse de uno es elevada. De hecho, toda relación comienza con el impulso seductor de dejar claro que deseas estar con esa persona mostrándole lo mejor de ti. El problema llega cuando la historia traspasa el límite de lo normal y se convierte en una relación insana, en la que pueden surgir reproches como «en nuestra relación yo puedo destacar, pero tú no», y otros mecanismos para atrapar a la víctima, que se sentirá anulada. Te damos todos los tips para que no vivas atrapada junto a un narcisista.
APRENDE A DETECTARLO EN TIEMPO RÉCORD
Según cuenta Joseph Burgo en su libro Narcisistas (ed. Paidós), para que alguien sea reconocido como tal debe reunir, al menos, cinco de estas actitudes: «Está convencido de su importancia; vive preocupado por fantasías de éxito ilimitado, genialidad o amor ideal; cree que es único y sólo puede ser comprendido por personas especiales; precisa admiración excesiva; exige trato preferencial; se aprovecha de los demás para alcanzar sus fines; carece de empatía; siente envidia o cree que lo envidian, y da muestra de actitudes arrogantes». ¿Las cumple tu pareja? ¡Es un ególatra de manual!
NO TODOS LOS NARCISISTAS SON IGUALES
Los egocéntricos tienen mil caras. Son frecuentes los acosadores, que enmascaran su inferioridad metiéndose con los más débiles; los seductores, que adulan para obtener lo que desean; los megalómanos, que se valen de todo para que los consideren únicos; los sabelotodo, expertos en lucirse en una conversación, así como los vengativos, dispuestos a ir a por ti si los cuestionas. Pero hay un ejemplar especialmente peligroso: el perverso narcisista que, como apunta el psicoterapeuta JeanCharles Bouchoux –autor de Los
perversos narcisistas (ed. Arpa)–, «aparenta ser amable y finge empatía, pero es frío y no conoce la culpabilidad».
¿NECESITAN LOS EGÓLATRAS TENER PÚBLICO?
Detrás de ese novio que se considera un trending topic, la mayoría de las veces se esconde alguien con problemas de autoestima. «Su principal objetivo es librarse de los conflictos internos que no pueden aguantar», explica Bouchoux. «No soportan la más mínima mancha en la capa de barniz que quieren mostrar a los demás y sus víctimas les sirven como vertederos que soportan sus faltas». Quizá el narcisista sabelotodo sí necesita espectadores pero, en casos más complejos, «su actitud cambia en función del entorno y sus agresiones se producen a puerta cerrada».
¿ES POSIBLE CONVIVIR CON UN TIPO ASÍ?
Desde la barrera, un ególatra podrá parecerte hasta divertido. Pero cuando lo tienes a tu lado, la cosa cambia. «Será difícil mantenerte imparcial porque afecta al modo en que te valoras a ti misma», escribe Joseph Burgo. Por tanto, lidiar con Mr. Ego implica distanciarte de la relación y mirar en tu interior para mantener alta la autoestima.
¿CÓMO BLINDARTE EMOCIONALMENTE ANTE UNO DE ELLOS?
Lo ideal es no tener que defenderte de nadie, y menos de la persona que quieres y con quien compartes tu vida. Pero si analizas fríamente la relación y en la balanza pesan más las cosas buenas que convivir con su personalidad ególatra, quizá puedas salir indemne y seguir tan enamorada como el primer día. «Comprender que tú no formas parte de los objetivos del narcisista puede ser muy saludable, porque te permitirá tomar distancia del problema», aconseja Bouchoux.
¿DÓNDE ESTÁN LOS LÍMITES DE LO TOLERABLE?
Aunque tú marques las líneas rojas, ten en cuenta que su actitud siempre te pasará factura porque los narcisistas pueden ser grandes manipuladores. Ante cada muestra de su egocentrismo no compensa iniciar una batalla de la que puedes salir asqueada; intenta ser empática y ponerte en su lugar pero hazle saber cuáles son los límites y las expectativas que tienes. Y, lo más importante, pregúntate si de verdad te compensa seguir manteniendo una relación en la que debes realizar un inmenso esfuerzo que tiene escasa recompensa emocional.
¿ES POSIBLE REEDUCAR A UN CHICO MUY CREÍDO?
Depende de cómo sea tu particular ególatra… «Si se trata de un narcisista perverso que se siente muy cómodo en su papel y disfruta ejerciéndolo, no será tarea fácil», asegura el autor de Los perversos
narcisistas. «Si hablamos de una personalidad frágil que sólo pone en marcha los mecanismos narcisistas de forma puntual, existe la posibilidad de reeducarlo, pero para conseguirlo tendrías que convertirte en una especie de madre salvadora». Algo que, por cierto, en una relación sentimental, además de no ser muy sano ni deseable, a la larga no suele dar resultado.