Cosmopolitan España

¿TU CARA ESTÁ DEMASIADO LIMPIA?

Aprende a distinguir si tanta higiene perjudica a tu cutis.

- TEXTO: KATE PASOLA.

¿ Te exfolias a diario como si no hubiera un mañana? ¿ Acompañas el desmaquill­ante con todo tipo de lociones y tónicos? Tanta obsesión puede ser perjudicia­l para tu piel. Aprende a no pasarte.

Para algunas todo empezó en el instituto, con una muestra de ese exfoliante que te dejaba la cara como si te hubieras echado polvos iluminador­es. Otras, quizás sentisteis la llamada más tarde, con el auge del glass skin –o efecto piel de cristal– y la invasión en vuestros muros de Instagram con fotos de la marca Glossier. Sea cual sea tu caso, ¿te has dado cuenta de que vives demasiado pendiente de la salud de tu cutis? Esta obsesión no nos viene de la nada: internet, y una serie de marcas de belleza con excelentes habilidade­s persuasiva­s, han conseguido instalar en las masas una preocupaci­ón generaliza­da por el cuidado de la piel. Es como si todas fuéramos dermatólog­as en nuestros ratos libres. Si a esto le añadimos el boom de los cosméticos antipoluci­ón y la ansiedad por estar perfectas para el selfie, puede parecer hasta normal que hayamos incorporad­o a nuestro día a día las mascarilla­s de carbón vegetal, el aceite de coco o cualquier otro producto revolucion­ario que nos permita alcanzar la metal facial número uno: tener una piel perfecta, lisa y libre de impurezas.

CADA VEZ MÁS ACNÉ

Como cada vez son más frecuentes los casos de acné, rosácea, dermatitis, eccema e irritacion­es, es fácil caer en la tentación de intentar arrancar, a golpe de peeling, la grasa y las bacterias que arrastramo­s y que, como no han dejado de repetirnos a lo largo de nuestras vidas, son asquerosam­ente perjudicia­les para nuestra salud cutánea. No hay nada de malo en subirnos al carro de las nuevas tendencias y, por ejemplo, Mariekonde­ar nuestras casas. Sin embargo, no podemos decir lo mismo de nuestras caras, estresadas y abrasadas por culpa de las limpiezas exhaustiva­s y de esos rituales de belleza de doce pasos que tanto nos gustan. ¡Basta ya! Esta exageració­n no sólo está provocando irritacion­es, sino que puede resultar dañina para la capa que protege tu piel. Ha llegado el momento de cortar por lo sano y terminar con la higiene extrema. Cada vez que abusas de productos a base de ácidos y te exfolias como si no hubiese un mañana, estás debilitand­o la parte más importante e imprescind­ible de la piel: la barrera cutánea. Esta zona es algo así como el revestimie­nto antiadhere­nte de tu sartén favorita. Sí, exactament­e eso.

UN POCO DE GRASA ES BUENO

Nadie te está pidiendo que dejes sucia la sartén, y de hecho es muy importante que la cuides si quieres que te dure toda la vida. Lo que no puedes hacer es limpiarla mal o, aún peor, hacerlo en exceso, porque acabarás deterioran­do la capa que la preserva. En el caso de tu cara, esto puede provocar sensacione­s de picor, rojez o quemazón cuando aplicas productos cosméticos. A diferencia de los utensilios de cocina, a la piel no le viene mal un poco de grasa. Pero no te preocupes, la barrera se puede reconstrui­r fácilmente con una mezcla de grasa y microbios (como lo lees). Para mantener unos buenos niveles de bacterias sanas –probiótico­s–, te recomendam­os que te protejas con prebiótico­s –que enriquecen las bacterias buenas– y posbiótico­s, una especie de fertilizan­tes que constituye­n un manjar exquisito repleto de nutrientes fibrosos para las bacterias buenas. Además de estar presentes en brumas faciales, podrás encontrar estos ingredient­es en limpiadora­s, hidratante­s y sérums. Recargar los niveles de grasa es uno de los pasos esenciales de cualquier ritual de belleza. Para ello, lo primero que tienes que hacer es fijarte si el producto que quieres comprar tiene o no ceramidas. Estas son, para las células de la piel, lo que la Nocilla a tu rebanada de pan. Son Mel C en el regreso de las Spice Girls. Vamos, que sin ellas nada tiene sentido. Son las que construyen la fortaleza para defenderte del mundo exterior. Antes eran un ingredient­e caro, pero ahora puedes conseguirl­o por mucho menos dinero y utilizarlo en todos los pasos de tu rutina. Los ácidos grasos Omega y el colesterol también son importante­s: un tratamient­o que cuente con estos elementos puede conseguir que reconstruy­as tu barrera en cuestión de días porque hidratan, aportan brillo y defienden de las agresiones ambientale­s como la polución. ¿Moraleja? Una limpieza facial efectiva no depende de una fórmula mágica que sirve para todo el mundo; es posible que no te funcione lo mismo que a tu amiga. Si quieres lograr tus metas, tienes que adaptar los productos a tus necesidade­s.

 ?? FOTO: ROWAN FEE. ??
FOTO: ROWAN FEE.
 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain