¿QUÉ ES LA HUELGA DE MATERNIDAD?
Te lo contamos.
En España, la natalidad está por los suelos, con una de las medias más bajas de Europa. Según el INE, un 18,3% de las españolas de entre 30 a 34 años no desea ser madre, cifra que sube al 22,8% en el periodo de los 35 a los 39. Las principales razones son económicas, laborales o de conciliación. O que, simplemente, no quieren cambiar de estilo de vida. Diana López Varela, autora del libro Maternofobia (ed. Península), señala: «Analizo la situación de una manera poco académica pero ilustrativa: la mayoría de las no madres con las que he hablado no desean renunciar a su situación social por tener hijos. La causa primordial es tu propia existencia, tu habitación propia».
ECOLOGÍA SÍ, ¿BEBÉS NO?
Otro motivo para no tener descendencia es el futuro incierto por el cambio climático. En Reino Unido, el movimiento BirthStrike (huelga de nacimiento) propugna seguir en paro hasta que no se controle esta emergencia. Su pregunta es la misma que lanzó en sus redes la congresista de EE. UU. Alexandria OcasioCortez a sus tres millones de fieles: «¿Está bien seguir teniendo críos?». Según los llamados ginks (Green Inclinations, no Kids), proeco y sin hijos, la respuesta es «no». Este colectivo no rechaza a los peques, ni a quienes los tienen. Como explica Blythe Pepino, «se solidarizan con ellos, celebran su elección y luchan por la seguridad y la vida de sus retoños», pero lo hacen alineados con la justicia ambiental y una acción rápida por un futuro sostenible. «Los niños deberían ser traídos a un mundo sin la amenaza de sequías y escasez de alimentos», señala Blythe. «Me parece una opción muy sensata. ¿De verdad necesitamos más bebés?», se pregunta López Varela.