Carta de la directora.
¡Rescata, restaura, reforma, recicla, reinventa, recapacita! Con este grito de guerra lanzamos de manera oficial nuestro número de septiembre, un mes en el que tradicionalmente las revistas femeninas se centran en la moda que viene y que en COSMO hemos decidido dedicar también y sobre todo a la moda que permanece. ¿Un ataque de locura? Más bien de sentido común, porque si gastar con cabeza siempre ha sido importante, en los tiempos del COVID-19 hacerlo de modo responsable resulta más imperativo que nunca. El motivo es que hoy los millennials y los miembros de la generación Z desean un armario con marcas que apuesten por la calidad y el diseño, pero que también reflejen valores fundamentales como la sostenibilidad, la diversidad y, por supuesto, el respeto a los derechos humanos. Fanny Moizant, cofundadora de Vestiaire Collective, afirma en un reciente estudio publicado por este portal fashion de segunda mano que «la crisis provocada por el coronavirus ha acelerado las tendencias que ya despuntaban en el sector ¿Ejemplos? El boom del comercio electrónico, la sustitución de la compra impulsiva por la reflexiva, la adquisición de prendas como inversión, el auge del interés por los diseñadores locales y una creciente curiosidad sobre quiénes están en el verdadero backstage de la producción. ¿Los trabajadores reciben sueldos dignos que revierten positivamente en su comunidad?, ¿desempeñan jornadas justas en espacios saludables?, ¿disponen de seguro en caso de accidentes laborales? Hoy tus decisiones a la hora de vestir de una u otra marca cuentan, porque tienen un impacto directo en la vida de otras personas. Busca información, elige conscientemente y sigue el mantra del gran Mahatma Gandhi: «Conviértete en el cambio que quieres ver en el mundo».
« Tus decisiones de consumo cuentan porque tienen un impacto directo en la vida de otras personas »