Vivir con el arruí
Exterminar a estos animales no es una opción real porque sería simplemente imposible. La fauna y flora típica de la región murciana va a tener que convivir con el arruí o muflón de origen norteafricano. Esta oveja salvaje con su llamativa melena e imponentes cuernos fue introducida allá por el año 1970 con el único objetivo de ganar dinero con su caza. Con ello, se asumió el riesgo de que podría comerse plantas protegidas y representar una amenaza para la cabra montés autóctona. El arruí se ha adaptado rápida y perfectamente a su nuevo entorno. Para evitar que pueda causarle daños irreversibles al sistema ecológico es preciso controlar las poblaciones de este animal, y eso incluye prohibir su caza. Sólo así será posible evitar que se mantengan artificialmente altas poblaciones para vender licencias de caza. Además de que la introducción de especies invasoras no debería crear escuela. Ayer fue el arruí, mañana quizá sea otra especie con bonitos cuernos, colmillos impresionantes o piel brillante.