Gigantischer Chemiereaktor
Von Huelva wusste ich nicht viel, bis mich Mitglieder der Umweltorganisation Mesa de la Ría einluden, die „Balsas de Fosfoyesos“kennenzulernen. Ein 1.200 Hektar großes Feuchtgebiet direkt vor der Stadt und zwischen den Flüssen Tinto und Odiel, in das Chemie- und Schwermetallkonzerne wie Fertiberia oder Atlantic Copper in den vergangenen Jahrzehnten zirka 120 Millionen Tonnen Phosphorgips und andere toxische und radioaktive Stoffe eingeleitet haben. Ohne wirkliche Kontrolle und mit dem Einverständnis der Behörden. Auch etwa 7.000 Tonnen radioaktive Cäsium-137-Abfälle wurden 1998 von den verantwortlichen Behörden unter einer Erdschicht von einem oder zwei Metern verscharrt. Heute sind diese Industriemüllhalden, zwischen acht und 25 Meter hoch, obwohl nur drei erlaubt sind. In Huelva ist das Risiko, an bestimmten Krebsarten zu erkranken, doppelt so hoch wie im restlichen Spanien. Nach meinem Besuch in Huelva war ich geschockt: Eine derartige Kontamination hätte ich in einem demokratischen Land niemals erwartet. Wiltrud Schwetje No sabía mucho sobre Huelva, hasta que algunos activistas de la organización mediambiental Mesa de la Ría me invitaron a conocer las "Balsas de Fosfoyesos". Se trata de unas 1.200 hectáreas de humedales, situadas entre los ríos Tinto y Odiel y muy cerca de la misma ciudad, donde multinacionales químicas y de metales pesados, como Fertiberia o Atlantic Copper, fueron vertiendo durante las últimas décadas alrededor de 120 milliones de toneladas de fosfoyesos y otros residuos tóxicos y radioactivos. Prácticamente sin control alguno y con el consentimiento de la administración. En 1998 las autoridades responsables mandaron enterrar además unas 7.000 toneladas de residuos de Cesio-137, bajo una capa de tierra de uno o dos metros. Hoy en día, estas montañas de residuos alcanzan alturas de entre ocho y 25 metros, cuando sólo están permitidos tres. En Huelva, se corre el doble riesgo de contraer algún tipo de cáncer que en el resto de España. Mi visita a Huelva me dejó en estado de shock. Jamás me hubiera esperado una contaminación de tales dimensiones en un país democrático.