Freiheit den Bourbonen!
Juan Carlos´ Lebenswerk neigt sich dem Ende. Soll man ihn dafür respektieren, in seinem engen Korsett in wichtigen Momenten das Richtige getan zu haben? Oder soll man sich über Standesdünkel, Privilegien und bigotte Dekadenz der Bourbonen mitten in der Demokratie erregen? Man kann auch Mitleid für eine gestohlene Kindheit empfinden, in der Juan Carlos keine Wahl hatte, im goldenen Käfig er- und verzogen, vom eigenen Vater an einen Diktator verpfändet wurde. Selten war Juan Carlos Akteur, öfter Spielball oder Aushängeschild. Zuletzt mehr Karikatur. Sein Sohn Felipe ist musterhaft und ambitionslos genug, um sich allein an der Spitze der Bourbonen-Dynastie zu behaupten, die absurderweise das Amt des Staatschefs inkludiert. Auch er ist nur bedingt Herr seines Lebens. Vielleicht erspart ein gereiftes Spanien dessen Töchtern dieses Schicksal und schenkt ihnen ein Leben als freie Bürger, anstatt sie das ranzige Erbe der Monarchie wie eine rostige Fußfessel hinter sich herziehen zu lassen.
Libertad para los Borbones
La obra de Juan Carlos toca a su fin. ¿Debemos respetarle por haber hecho lo correcto en el momento adecuado dentro del estrecho corsé en el que se encontraba o exasperarnos por el esnobismo, los privilegios y la mojigata decadencia de los Borbones en medio de la democracia? También cabe tener compasión con una infancia secuestrada en la cual Juan Carlos no tuvo elección, siendo (mal-)educado en una jaula de oro y puesto en manos de un dictador por su propio padre. Juan Carlos fue más juguete y testaferro, raras veces actor, al final caricatura de sí mismo. Su hijo Felipe es lo suficientemente ejemplar y sin ambiciones para consolidarse a la cabeza de la dinastía Borbona que, absurdamente, incluye el cargo de Jefe de Estado. También él tiene un control limitado de su propia vida. Algún día, quizá en una España más madura, sea capaz de ahorrarles el mismo destino a sus hijas permitiéndoles vivir como ciudadanas libres en vez de obligarlas a seguir arrastrando el rancio legado de la monarquía como un grillete oxidado.