TEFLÓN: AYER Y HOY
Fue el colmo de la modernidad y comodidad porque la comida no se pegaba a la sartén, pero escondía una «trampa»: aunque el antiadherente en sí (PTFE) era seguro, la sustancia que lo unía a la sartén, no. Se trataba del PFOA, que se comporta como disruptor endocrino y se ha relacionado con tumores hormonodependientes, se acumula en riñones e hígado, daña el sistema inmunitario y pueden producir esterilidad, obesidad y otros trastornos.
Es importante retirar las viejas sartenes de teflón, sobre todo si están ralladas. Las nuevas ya no contienen ese tóxico pero para muchos han perdido credibilidad. Y han salido materiales como el antiadherente con titanio sin ese «pasado oscuro».