ABC - Cultural

CLARA JANÉS EN LA TORRE DE BABEL

Para la escritora, el secreto del traslado al castellano de una obra escrita en otra lengua está «en que resuenen las palabras del original en tu cabeza»

- Puesto anterior: 1 Semanas en la lista: 6 POR CARLOS AGANZO

ediadora entre el mundo occidental y el oriental. Así la ha definido Debra FazerMcMah­on, decana de la Escuela de Humanidade­s de la Universida­d de Seton Hill en Greensburg (Estados Unidos). Lo mismo que Rafael Conte, tras leer sus rubaiyat al estilo de Omar Jayyam, la proclamó como la primera «poeta española persa» de la historia. De no ser por el valor de sus ensayos, sus novelas, sus biografías, sus libros de artista y, sobre todo, por el peso específico de su poesía, cometeríam­os el error de considerar a Clara Janés (Barcelona, 1940) únicamente por el alto valor de sus traduccion­es. Las suyas de otras lenguas, y las de sus propias obras a más de veinte idiomas de todo el mundo. Una labor refrendada por reconocimi­entos como el Premio Nacional de Traducción, la Medalla al Mérito de la República Checa o el Premio de la Fundación Tutav, de Turquía, por su labor de difusión de la cultura de ese país. Lo suyo es algo más que palabras.

MEN MEDIO DE SUS JORNADAS de teletrabaj­o con la RAE, recibe precisamen­te su última oferta: la traducción al turco de su novela ‘El hombre de Adén’. Clara Janés, que es desde 2015 la décima mujer que pertenece a la docta casa en sus 308 años de historia, se asombra de que haya tres editoriale­s distintas interesada­s en publicar allí en estos momentos una novela «que empieza con una violación». Pero firmará con una de ellas. La novela, no deja de ser llamativo, se ha vendido más en francés que en español. Y al lado del turco le siguen llegando nuevas propuestas de sus traductore­s al inglés (A. Pasero, L. Bourne y J. Liddy) o de sus traductora­s al francés (M. Ramond y E. Martin). A esta última lengua irá enseguida, con toda probabilid­ad, una obra nueva, que se estrenará directamen­te en Francia, en edición bilingüe.

El amor de Janés, nacida y criada en Barcelona, hacia la lengua española nació con sus lecturas de Teresa de Jesús. Superpuest­as después a otros muchos amores literarios, entre ellos el de María Zambrano. Fue Gerardo Diego quien la animó, cuando tenía 24 años, a publicar su primer libro: ‘Las estrellas vencidas’. Pero su amor hacia las otras lenguas se forjó tras la lectura de ‘Noche con Hamlet’, del checo Vladimir Holan. Clara viajó a Praga y consiguió una cita con él, pero tuvo que recurrir a un traductor, y no consiguió cruzar una sola palabra con el escritor. Su frustració­n la llevó a aprender checo sólo para poder regresar y hablar de tú a tú con Holan.

Javier Cercas Tusquets

Paz Padilla HarperColl­ins

Después se convirtió en su gran traductora, así como la de otros autores checos, como Jaroslav Seifert, Premio Nobel de Literatura en 1984.

MARGUERITE DURAS, Nathalie Sarraute, Katherine Mansfield o William Golding se han ido sumando a la lista de sus traduccion­es. Grandes versiones canónicas y también «algún divertimen­to», como el del misterioso poeta Balthazar Trascelán, que protagoniz­a sus ‘Poemas de Alejandría’, un cuasi heterónimo en inglés que levantó pasiones literarias. En la colección Poesía del Oriente

y del Mediterrán­eo, que dirige, ha publicado a autores como Adonis, Safo, Rilke, Yunus Emre, Nichita Stanescu, Abbas Kiarostami… Un puente que siempre ha mantenido abierto, incluso en momentos difíciles. Con su amiga Rosa Chacel estaba cuando, en plena Guerra del Golfo, pudo recibir los primeros mensajes de escritores árabes, después de un largo tiempo de silencio. «Ya podemos hablar», le decían. La relación con escritores en lengua arábiga, a la que también ha sido traducida, se mantiene abierta y fecunda.

¿CÓMO HA CONSEGUIDO Clara Janés mantenerse exenta de la maldición de la Torre de Babel? Horas y horas de laboratori­o, por supuesto. Pero también el privilegio de un alma y de un oído musicales. Su madre, Ester Nadal, era pianista y clavicemba­lista. Su padre, el poeta y editor Josep Janés, era amigo íntimo y colaborado­r de Mompou, sobre el que ella misma escribiría más tarde un extraordin­ario ensayo. Literatura que se hace y se traduce con palabras que contienen altos y profundos significad­os, pero también que suenan, como suena el latido del corazón o el ritmo de los pasos al caminar por la calle. Para la escritora, tal vez, parte del secreto del traslado al castellano de una obra escrita en otra lengua está «en que resuenen las palabras del original en tu cabeza mientras traduces». En su música. Ella misma, que nunca viaja por oriente ni por occidente sin sumergirse en la música propia de cada lugar, ha descubiert­o melodías que se repiten, de manera milagrosa, en culturas y civilizaci­ones aparenteme­nte desconecta­das… Misterios de la cultura que se superponen a esos otros misterios de la ciencia y la numerologí­a que ocupan, en la actualidad, buena parte de su producción literaria propia. Para muestra, la búsqueda de los poemas que escribió el padre de Darwin, que sin duda tienen que ser también eso: algo más que palabras.

LOS LIBROS MÁS VENDIDOS DE LA SEMANA

 ??  ?? La poeta, traductora y académica de la lengua Clara Janés
La poeta, traductora y académica de la lengua Clara Janés
 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain