Los niños vuelven a clase en Inglaterra pese a que el virus sigue causando estragos
Las escuelas de Primaria en Inglaterra empezaron a recibir ayer a algunos alumnos como parte de la desescalada por la Covid-19, si bien muchos padres no enviaron a sus hijos al colegio por temor a un posible contagio. El Gobierno británico dispuso que los menores de entre 4 y 7 años y los de que están en el último curso de primaria –a los 10 años– en Inglaterra regresaran ayer a clase, después de que los centros educativos cerrasen a finales de marzo para contener el Covid-19.
Estos primeros pasos de la desescalada se aplican en Inglaterra, ya que las autonomías de las otras tres regiones (Escocia, Gales e Irlanda del Norte) aún mantienen el cierre de colegios. Desde que el Ejecutivo de Boris Johnson dispuso el cierre de las escuelas a finales de marzo, los colegios se han limitado a recibir a alumnos que necesitaban alguna especial atención o los hijos de trabajadores esenciales, como médicos/as o enfermeros/as.
Además de la apertura de escuelas, las autoridades permiten desde ayer que personas de distintos hogares puedan reunirse al aire libre, pero el número del grupo es bajo, de no más de seis ciudadanos.
En cualquier caso, las críticas se ceban con Johnson tras rebasar la cifra de 39.000 muertos (39.045) por el virus confirmados por los tests en hospitales, residencias y domicilios desde el inicio de la pandemia tras sumar 111 fallecidos. El Ministerio de Salud informó de 1.570 nuevos contagios en una jornada en la que las escuelas primarias han reabierto en Inglaterra, a pesar de las advertencias de algunos científicos, que consideraron prematura la desescalada.
Muchas familias dejan en casa a sus hijos por miedo el día en que el Reino Unido rebasa los 39.000 fallecidos