La proyección internacional de los doctorados de la UAL abre la colaboración con DLR
La revista Corrosion Science (176 (2020) 108928) acaba de publicar un estudio realizado conjuntamente por siete investigadores, cuyo identificador digital es https://doi.org/10.1016/j.corsci.2020.108928 y que lleva por título ‘Corrosion on silvered-glass solar ref lectors exposed to accelerated aging tests with polluting gases: A microscopic study’. Para el mismo, siendo esto una importante aportación, se ha utilizado la técnica Focused Ion Beam, conocida como FIB, en el análisis de las muestras de espejos vidrioplata. Y es que este trabajo se ha centrado, “usando técnicas avanzadas de microscopía”, en el efecto que los gases contaminantes tienen en la durabilidad de los ref lectores solares. Este ha sido el objetivo principal de una tesis que dentro del Programa de Doctorado en Ciencias Aplicadas al Medioambiente ha dirigido la profesora María Jesús Ariza, del
Departamento de Química y Física de la UAL, en colaboración con la Plataforma Solar de Almería, de la que es autor Alejandro García. El ahora ya doctor por la Universidad de Almería realizó en Colonia una estancia predoctoral, en concreto en el Institute of Materials Research del Deutsches Zentrum für Luft- und Raumfahrt (DLR), y de ella surgió esta colaboración a tres bandas institucionales.
Junto a los dos investigadores referidos, son firmantes del artículo Aránzazu Fernández y Loreto Valenzuela, ambas del CIEMAT-PSA, Philipp Watermeyer y
Martin Schmücker, del Institute of Materials Research, y Florian Sutter, del Institute of Solar Research, igualmente integrado en el Centro Aeroespacial Alemán, y de la propia Planta Solar de Almería. Precisamente el uso de la técnica FIB “ha sido posible gracias a la colaboración con el Instituto del DLR en Colonia”, ha subrayado María Jesús Ariza, suponiendo la realización de este trabajo de investigación conjunto una buena muestra de la proyección internacional de los doctorados que se cursan en la Universidad de Almería. Especialmente importante ha sido este caso, dado el alto prestigio del que goza la institución alemana de referencia, suponiendo además las aportaciones realizadas de gran utilidad en el mantenimiento de las plantas solares y en el diseño futuro de reflectores más duraderos, utilizando nuevos materiales en su construcción para optimizar su rendimiento.
A ese respecto, las claves del trabajo pasan por que dichas plantas solares destinadas a producción de electricidad o calor se instalan frecuentemente en polos y polígonos industriales con altos niveles de contaminación: “Algunos de estos contaminantes son gases muy corrosivos, como el SO2, H2S, NOx, …”. Por otro lado, en las instalaciones solares térmicas se usan espejos, ref lectores solares, “para recolectar y concentrar la luz y así aprovechar mejor la energía que nos llega sol”.
La tesis de Alejandro García auspicia una investigación entre la UAL, CIEMAT y el Centro Aeroespacial Alemán