“Del coronavirus hay que salir con una buena calidad de vida”
Esperanza Hay que tener esperanza en
las vacunas y en los tratamientos que pueden
mejorar al paciente
Jorge Fernández Parra es especialista en Obstetricia y Ginecología y Presidente del Colegio de Médicos de Granada
LA crisis sanitaria provocada por el coronavirus lleva golpeando la vida de las personas más de un año. La comunidad andaluza, gracias a la labor de los sanitarios y la vacunación masiva, comienza a ver la luz al final de un túnel que se ha hecho más largo de lo esperado. Aunque la realidad invita a ser optimistas, las personas deben recordar los momentos más duros vividos para no cometer errores futuros que nos hagan retroceder los pasos que con tanto esfuerzo hemos dado. Para ello, contamos con el testimonio de Jorge Fernández Parra, médico especialista en Obstetricia y Ginecología y presidente del Colegio Oficial de Médicos de Granada.
Tras más de un año de pandemia y cuando parece que la misma está empezando a remitir, Jorge Fernández echa la mirada atrás para recordar los momentos más duros de la crisis sanitaria. El profesional sanitario afirma que “la primera ola fue un tiempo de grandes incertidumbres porque desconocíamos el virus, qué métodos podían ser eficaces, y tampoco teníamos clara su transmisión. Al mismo tiempo se añadió la falta de material que vivimos en todos los centros sanitarios”. Aun así, Fernández recuerda que todos sus compañeros “hicieron todo lo que pudieron” y no les flaquearon las fuerzas aunque veían constantemente que “la población no entendía la magnitud del problema”.
Constancia y trabajo en la lucha contra el coronavirus de intensivistas, internistas, neumólogos, médicos de urgencias... un conjunto de héroes con bata que veían como pacientes no podían ser atendidos por otro tipo de dolencias. Por aquel entonces, “había listas de espera importantes y no estábamos atendiendo a pacientes que nos estaban demandando ser atendidos. Así como al principio asumimos que era una necesidad, que teníamos que dar un paso al frente, también hemos visto que se han tomado decisiones que no han sido las adecuadas, cómo hay poca responsabilidad en algunos sectores sociales, y eso hacía que tuviéramos ganas de terminar con todo esto”.
En la deriva sanitaria entre tanta ola por el aumento incesante de contagios, el presidente del Colegio Oficial de Médicos de Granada cree que la gestión de la pandemia fue “muy complicada desde el principio porque era algo novedoso. Es cierto que hemos pasado por diferentes fases y de cada una se ha ido aprendiendo. Ahora tenemos más capacidad diagnóstica”. En relación a esta cuestión y aunque durante todo el año “se ha avanzado mucho en la realización de diagnóstico, de medidas en los centros sanitarios, en el rastreo, también en el manejo de los pacientes ingresados, con las protocolos más ajustados y con estancias menores de los compañeros”, la realidad es que esta problemática se lleva “mucho tiempo diciendo desde los colegios de médicos, y es que hacen falta profesionales, médicos y de enfermería” para afronatr próximas crisis sanitarias.
Fernández Parra quiso abordar el tema de l a vacunación y explica que “se debe tener esperanza en las vacunas y en los tratamientos que pueden mejorar la estancia hospitalaria y reducir la mortalidad y los ingresos en UCI”. Además, fue claro y aseveró con rotundidad que “del coronavirus no solo hay que salir, sino salir con una buena calidad de vida y hay pacientes que tienen unas secuelas importantes. Por eso la vacuna es fundamental para evitar contagiarse del Covid”.
Por último y cuestionado sobre los peores momentos de la pandemia y si esto le ha hecho cambiar como médico y persona, el médico especialista en Obstetricia y Ginecología asegura que “la situación más difícil era cuando no había medidas de protección y no había manera de conseguirlas. Además, psicológicamente ha afectado mucho a los compañeros porque daba la impresión de que no salías, de que estabas haciendo un esfuerzo y que siguías sin obtener una recompensa”. En cuanto a su situación a nivel personal, se siente “muy orgulloso de ser médico, de mis compañeros que han estado en primera línea. Por mi especialidad hemos atendido a mujeres embarazadas con Covid, pero que no era lo mismo que los que han estado en los centros de salud, en las urgencias, en las plantas o en intensivo. En lo personal ha sido una gran responsabilidad por lo que hemos vivido, pero también por lo que queda por delante, que nos queda un esfuerzo importante”.