La Justicia de los Países Bajos dicta tres cadenas perpetuas por el derribo del vuelo MH17 en 2014
La Justicia neerlandesa dictó ayer cadena perpetua a dos rusos y un ucraniano juzgados en rebeldía por su papel en la tragedia del vuelo MH17, el avión de Malaysia Airlines derribado en el este de Ucrania en 2014, en un proceso judicial con el foco puesto en Rusia.
Los rusos Igor Girkin y Sergey
Dubinsky y el ucraniano Leonid Kharchenko son “culpables” del asesinato de las 298 personas que iban a bordo del MH17, concluyó el tribunal, que señaló que las conversaciones interceptadas y usadas como prueba en el juicio son “auténticas”, corresponden a llamadas entre los acusados, y las grabaciones “no fueron manipuladas”, ni tampoco lo están las fotos y vídeos usados como evidencia.
Además, consideró probado que el avión fue “derribado por un misil BUK desde un campo agrícola” cerca de Pervomaiskyi, en el este de Ucrania, que estaba en manos de rebeldes prorrusos, descartando escenarios alternativos como un accidente, y consideró que Rusia estaba involucrada en la
“acción armada” contra el Ejército ucraniano en Donetsk.
Según el tribunal, los tres trabajaron en estrecha colaboración para llevar el lanzamisiles BUK desde Rusia a la zona rebelde, y retirarlo después, y los consideró responsables del derribo debido a su papel militar de liderazgo y su cooperación consciente con el objetivo de derribar un avión, aunque subrayó que no fueron ellos quienes dieron la orden de disparar.
El ex coronel de Inteligencia Girkin era el líder militar de Donestk en la zona donde estaban activos los rebeldes prorrusos y tenía contacto directo con Moscú.
Kharchenko era comandante de un grupo de rebeldes y estaba a las órdenes de Dubinsky. Escoltó y supervisó el lanzamisiles, y su papel fue “fundamental” para el derribo.
Oleg Pulatov fue el único de los cuatro que no fue juzgado en “rebeldía”. Actuaba como jefe adjunto del servicio de inteligencia de los rebeldes en Donetsk.