Cubiertas vegetales
co”, ya que este parasitoide, el Aphidius Ericaphidis, ha permitido controlar al 90% los ataques del pulgón Ericaphis Seammelli.
El catedrático de Fisiología Vegetal y Farmacognosia en la Universidad San Pablo CEU Javier Gutiérrez, habló del empleo de biofertilizantes orientado al aumento de la producción y mejoras en respuesta a situaciones de estrés, un aspecto fundamental que en este momento afecta al conjunto del sector agrario, como es la sequía. Gutiérrez planteó el uso de métodos biotecnológicos para estimular y favorecer la fortificación de los mecanismos que tiene la planta para adaptarse a las condiciones de sequía. Así, con herramientas de tipo bacteriano (bacterias que forman parte del microbioma de la planta), se pueden fortificar los mecanismos propios de la planta para mantener la producción con un menor consumo de agua.
Carmen Reig, doctora ingeniera Agrónoma y profesora titular y de Máster por la UPV, se refirió al Equilibrio hormonal endógeno a lo largo del ciclo del cultivo. Explicó que es imprescindible conocer el contenido endógeno de la planta y ver qué factores lo regulan desde un punto de vista ambiental, genético, nutricional y hormonal. “Sólo sabiendo cómo evoluciona el contenido endógeno de la planta a lo largo del ciclo, podemos regularlo. Hay que conocer endógenamente qué le pasa, para luego tratar de imitarlo exógenamente, tanto desde la latencia hasta la recolección”.
El delegado territorial CAAE, José Manuel Gómez, se refirió al Cultivo ecológico de los Arándanos. Normativa y Posibilidades. Gómez explicó qué es la certificación ecológica y cuáles son los requisitos más relevantes en el caso del arándano y también detalló las buenas perspectivas que
Luis Miranda, responsable de Agricultura Sostenible Syngenta, habló de Cubierta vegetal y márgenes multifuncionales. En ella abordó las ventajas agronómicas y medioambientales del uso de cubiertas vegetales en los arándanos y de los márgenes multifuncionales de flores para la atracción de polinizadores e insectos auxiliares. Recordó que “ese manejo sostenible, más allá de la mejora de la biodiversidad, tiene un aporte económico que también hay que cuantificar”.
“Sólo sabiendo el contenido endógeno de la planta en su ciclo podemos regularlo”
ofrece: “El cultivo de arándano ya está instalado, con más de 1.000 hectáreas en ecológico, la conversión es fácil y el futuro es prometedor”.
Por su parte, el director de Innovación del Territorio de la Fundación lnstitut Cerdá, Lluís lnglada, habló sobre Aportación social, económica y ambiental del sector obtentor a la cadena agroalimentaria: el caso del arándano. Ofreció un resumen del estudio realizado por el instituto Cerdá para la Asociación Nacional de Obtentores Vegetales (Anove), en el que se analiza “cómo la I+D que hacen los productores de semillas y los mejoradores de cultivo contribuye a mejorar la productividad a lo largo de la cadena, a reducir los insumos necesarios, al valor añadido bruto y a la generación de ocupación. Y cómo, en definitiva, el trabajo de estas empresas obtentoras contribuye a dar respuesta a los retos del sector agroalimentario”. La jornada se cerró con el análisis de Gustavo Yentzen, quien expuso la situación global de la industria del arándano a lo largo de este año.