Un juez requisa los móviles a dos periodistas de Palma de Mallorca
La Asociación de Medios de Información condena el registro policial de las sedes del ‘Diario de Mallorca’ y Europa Press
Agentes de la Policía Nacional requisaron ayer los teléfonos móviles de dos redactores de Diario de Mallorca y la agencia Europa Press en las sedes en Palma de ambas empresas periodísticas, en las que también requirieron la entrega de ordenadores en el marco de la investigación sobre una filtración relacionada con el llamado caso Cursach. Los policías cumplieron órdenes del juzgado de instrucción 12 de Palma, que instruye la causa de presunta corrupción sobre la actividad fiscal de las sociedades del empresario del ocio nocturno Bartolomé Cursach.
Los agentes solicitaron a los periodistas información acerca de las fuentes de un informe policial sobre dicho empresario que se publicó a pesar de que la pieza estaba declarada secreta.
La Asociación de Medios de Información (AMI), entre los que se encuentran los dos medios registrados ayer, condenó con su “más absoluto rechazo” la intervención policial. Para la AMI estos hechos “representan un grave ataque al derecho de información y a la independencia de los medios de comunicación frente a todo tipo de presiones”. La asociación recordó a las autoridades policiales o judiciales que no pueden coaccionar a los profesionales de la información en el ejercicio de sus funciones, a los que les ampara el derecho de protección de sus fuentes.
También el Sindicato de Periodistas de las Islas Baleares como la Asociación de Periodistas de las Islas Baleares se han pronunciado en redes sociales en contra de la intervención policial y de la orden dictada por el juzgado de instrucción número 12 porque entienden que supone una vulneración del derecho al secreto profesional amparado por la Constitución.
En el registro en Europa Press, tres policías y una agente judicial pidieron a una redactora que les facilitara el informe sobre las contribuciones tributarias del Grupo Cursach sobre el que publicó una noticia a principios del pasado mes de julio y que revelara cómo lo había obtenido. La periodista, que se acogió al secreto profesional, Mallorca
La AMI denuncia que se ha producido un “grave ataque al derecho de información”