El socialdemócrata Lofven gobernará en Suecia por la abstención de los ex comunistas
El primer ministro despeja el camino para ser mañana reelegido y aislar del pacto a la extrema derecha
El socialdemócrata Stefan Lofven se aseguró ayer la reelección como primer ministro sueco al anunciar los ex comunistas su abstención en la votación del viernes en el Parlamento, lo que despeja el camino para su proyecto de gobierno rojiverde en minoría apoyado por el centroderecha.
Lofven, nominado ayer oficialmente candidato, había dado el primer paso para permanecer en el poder al cerrar mañana un pacto con liberales y centristas que dejaba aislado al ultraderechista Demócratas de Suecia (SD), tercera fuerza política.
Las concesiones al centroderecha en materia fiscal y laboral, y una cláusula que dejaba al Partido de Izquierda fuera de “cualquier influencia” en la dirección política de Suecia hicieron que esta formación exigiese el lunes una negociación directa con Lofven para no votar en contra en la Cámara y echar abajo su proyecto. El líder ex comunista, Jonas Sjostedt, anunció ayer el cambio de postura tras un acuerdo con Lofven para defender las reformas impulsadas la anterior legislatura, en que fue apoyo externo de su gobierno rojiverde, y dio por enterrada la cláusula.
Sjostedt justificó la abstención por el carácter antirracista de su partido (en alusión al SD) y advirtió a Lofven de que si lleva adelante las reformas del mercado laboral y de régimen de alquileres incluidas en el pacto con el centroderecha, apoyaría una hipotética moción de censura en su contra.
“Lo que está vigente es el acuerdo (con el centroderecha). Hay que cumplirlo. Cómo el Partido de Izquierda elige actuar en distintas situaciones es su responsabilidad”, se limitó a decir Lofven en rueda de prensa conjunta con el presidente del Parlamento, Andreas Norlen, para confirmar su candidatura.
Tanto conservadores como democristianos se mostraron dispuestos a respaldar una moción de censura y volvieron a atacar a sus todavía socios en la Alianza de centroderecha, centristas y liberales, que apoyan a Lofven para mantener aislada a la ultraderecha. “Han roto la Alianza a nivel nacional, pero haremos todo lo posible para seguir colaborando en el plano regional y local”, dijo el líder conservador, Ulf Kristersson, que tildó de “absurdo” el acuerdo con Lofven.
Tanto la centrista Annie Loof como el liberal Jan Bjorklund defendieron el acuerdo como la única solución posible y se mostraron seguros de que Lofven respetará el pacto.