El cambio de Gobierno andaluz provoca una renovación completa de los escoltas
El cambio de Gobierno trae consigo una profunda renovación entre los escoltas de la Presidencia y de las consejerías. Los escoltas pertenecen a la Unidad de la Policía Nacional adscrita a la Junta, lo que se conoce popularmente como Policía Autonómica.
Ninguno de los agentes a cargo de garantizar la seguridad de la presidenta saliente, Susana Díaz, repetirá en la cápsula de seguridad del nuevo presidente, Juanma Moreno, y Díaz se quedará con una tercera parte de los escoltas que tenía. Los ex presidentes gozan de protección y, además, ella cuenta con este servicio como líder de la oposición. Los demás agentes que han trabajado con Díaz en los últimos años ya ha abandonado la unidad de escoltas.
El servicio de seguridad del presidente será, por tanto, completamente nuevo. Estará formado por agentes más jóvenes que los que se encargaban de proteger a Díaz, entre los que había personas con más de 20 años en el mismo puesto. Algunos de ellos superaban los 60 años.
La persona encargada de diseñar la nueva cápsula de seguridad del presidente es Antonio Sanz, gran conocedor de la Policía Nacional por su etapa al frente de la Delegación del Gobierno en Andalucía. Moreno ni siquiera tiene previsto continuar con el coche oficial que usaba Díaz.
Fuentes de la Unión Federal de Policía (UFP) se han mostrado satisfechos con este cambio en el servicio de escoltas, tanto por la bajada en la edad media de los agentes de la nueva unidad como por la renovación entre los agentes dedicados a estas labores.
La Unidad Adscrita sigue sin un jefe nombrado desde junio de 2015, cuando el comisario jefe, Julián Márquez, presentó su dimisión. Lo hizo, precisamente, después de que le impusieran a dos escoltas por presiones políticas.