Moreno promete diálogo y también beligerancia por la unidad de España
El líder del PP se convierte en el primer presidente no socialista de la Junta con Rajoy y Clavero como referentes
Diálogo, empleo, y “beligerancia activa” en la defensa de la unidad de España. Esos son los ejes desgranados por Juanma Moreno en su primer discurso como presidente de la Junta de Andalucía. Arropado por casi mil personas, muchas agolpadas en el Salón de Usos Múltiples del Parlamento, el líder del PP se convirtió ayer en el primer presidente no socialista de Andalucía y también en el primero oriundo de las provincias orientales de la comunidad.
Después de la intervención de la presidenta del Parlamento, Marta Bosquet, el letrado mayor de la Cámara, Javier Pardo Falcón, dio lectura al Real Decreto –firmado por el Rey Felipe VI y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez– donde se refrenda la elección como presidente de la Junta de Juanma Moreno, quien acto seguido juró el cargo.
El primero de los objetivos que se puso el propio Moreno después de jurar el cargo de presidente de la Junta fue la mejora de los datos del paro en la región. “Será el gran empeño de mi Presidencia”, dijo el jefe del Ejecutivo, que también anunció “reformas valientes y eficaces” que le permitan conseguir la meta de mejorar la economía.
Moreno garantizó también su defensa de la unidad de España e incluso lanzó un mensaje a los independentistas catalanes. “Que nadie dude que esta Presidencia mantendrá una beligerancia activa contra quienes quieran romper España y dividir a los españoles”, espetó antes de hacer una defensa de la compatibilidad de los sentimientos españolista y andalucista en un acto que se cerró con los himnos de Andalucía y España. Moreno mostró su intención de “asumir dignamente el legado de don Manuel Clavero Arévalo”. Del ex ministro de UCD dijo que “con humildad y valentía defendió los pilares de nuestra autonomía”.
“Quiero ser el presidente de la Andalucía que dialoga y cree en el poder de la tolerancia”, insistió Juanma Moreno, para asegurar a continuciación que será “el presidente de los pueblos” y que trabajará para paliar la “desigualdad territorial” de una comunidad “muy grande”. “No quiero que nadie vea San Telmo como un refugio distante e inalcanzable”, insistió Moreno, quien tiene por objetivo acercarse “a todos los rincones” de Andalucía.
El jefe del Ejecutivo andaluz defendió el valor de la “cooperación” y se puso como referencia un “gran Gobierno”, el que presidió hasta mayo a Mariano Rajoy, con Soraya Sáenz de Santamaría
como vicepresidenta. “En momentos muy difíciles, su buen hacer, la decisión reformista y la inteligencia fueron un seguro para Andalucía. Tanto Rajoy como Sáenz de Santamaría estuvieron ayer en la Cámara, al igual que Pablo Casado, presidente del PP, con quien Juanma Moreno, asegura, comparte “generación, principios e ideas”.
El ya presidente de la Junta también mostró su agradecimiento a dos de sus predecesores al frente de los populares andaluces: Javier Arenas y Teófila Martínez. “Teófila es el carisma y la determinación”, dijo de la ex alcaldesa de Cádiz, mientras que de Arenas dijo admirar “su liderazgo, su vocación de servicio, su saber estar y su amor a Andalucía.
El presidente de la Junta aludió también a su padre, fallecido en 2014 y que ayer habría cumplido 78 años. “Tenía la esperanza de vivir este día y ser testigo de la alternancia en Andalucía”, señaló Juanma Moreno, que ayer estuvo acompañado por su madre y sus hermanas en el Parlamento. Moreno también tuvo palabras para su mujer y sus hijos. “En mis hijos veo el futuro que quiero forjar para Andalucía”, reconoció Juanma Moreno, que cerró su discurso diciendo que “quiero dejar Andalucía mejor de lo que me la encontré”.