Colombia también se alza contra el Gobierno
La ola de incidentes para atacar las políticas de Duque causa al menos tres muertos y 96 heridos
La sociedad colombiana lanzó al Gobierno un mensaje claro de que quiere un cambio de rumbo en su política económica y social que espera sea escuchado en la administración del presidente Iván Duque, donde hasta ahora no ha tenido eco. Las multitudinarias manifestaciones del jueves en todo el país, lideradas por jóvenes y trabajadores, y sobre todo el prolongado cacerolazo nocturno en Bogotá, mostraron que más allá de colores políticos, el país ha cambiado. Al menos tres personas murieron y 98 más fueron detenidas en la multitudinaria jornada.
“Debe interpretarse la voz de la sociedad civil reclamando sus derechos. El Gobierno nacional tiene que escuchar y dar respuestas adecuadas: es tiempo de grandeza para convocar a un consenso que conduzca a un gran acuerdo nacional con las organizaciones sociales y políticas”, manifestó el procurador general, Fernando Carrillo.
Sin embargo, la reacción del Gobierno ha estado por debajo de la gravedad de las algaradas, tanto que hasta miembros del partido Centro Democrático, al que pertenece el presidente, manifestaron su disconformidad con la gestión que la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo, está dando a las reclamaciones. Duque dirigió la noche del jueves una alocución al país para referirse a la protesta y condenó los actos vandálicos que se produjeron en Bogotá, Cali y otras ciudades, pero no dio señales de que esté dispuesto a abrir una vía de diálogo con los organizadores de las manifestaciones y con los partidos políticos.
El presidente dijo escuchar a los colombianos y que “el diálogo social ha sido la bandera principal de este Gobierno”, que debe profundizarse “con todos los sectores de esta sociedad”, pero no fue más allá y no hizo una convocatoria a un diálogo nacional para debatir demandas y posibles soluciones.