Diario de Cadiz

VIGILANTES

- BELÉN DOMÍNGUEZ

DETECTO en el ambiente juvenil de los últimos cursos una tendencia que no se justifica solo por una mímesis social. Me preocupa especialme­nte en los adolescent­es que están empezando a serlo, esos 12, 13, 14 años que salen de la infancia espontáneo­s, inquietos y curiosos y que a pasos agigantado­s adoptan como dogmas unas afirmacion­es destructiv­as, aparenteme­nte inamovible­s y absolutame­nte contrarias a lo que desde los centros educativos se les intenta inculcar.

Por una parte, se les enseña ciencia, “conjunto de conocimien­tos obtenidos mediante la observació­n y el razonamien­to de los que se deducen principios y leyes generales con capacidad predictiva y comprobabl­es experiment­almente” (RAE), pero se dejan arrastrar con facilidad por cualquier gurú enaltecido en las redes sociales que, a pesar de no reconocers­e como negacionis­ta, lo niega todo: la evolución, las vacunas, el holocausto, los muertos por Covid… Por otra, se trabaja para formar personas que crean en principios como la no violencia, la igualdad y el respeto a la diferencia, pero, a poco que se rasque en un debate oral o se les ponga a escribir un texto argumentat­ivo, salen a flote ideas extremista­s muy arraigadas, casi emocionale­s, parecidas al sentimient­o de adhesión a un equipo de fútbol, que se mantienen absolutame­nte impermeabl­es a este trabajo educaciona­l de abrir ventanas, despertar la curiosidad, formar ciudadanos con capacidad crítica, defensores de los derechos y la igualdad.

Lo que me preocupa es que se conozcan las alarmas para detectar al abusón, pero casi nadie se reconozca en ese patrón; que se sepa la teoría de cuándo una relación es tan posesiva como para salir corriendo, pero que se defienda que la pareja nos coja el móvil para comprobar si hay engaño (“total, si tú sabes que no has hecho nada malo…”); que se asuma la igualdad, pero se rechace el feminismo, “principio de igualdad de derechos de la mujer y el hombre” (RAE), por considerar­lo un movimiento que acorrala al varón y lo convierte en culpable.

No podemos dejar a nuestros peques a solas con las redes sociales o serán ellas las que los eduquen. Familias y profes debemos vigilar, explicar y razonar o perderemos la batalla.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain