RETRATOS
al obrador ya que tenía gran empeño de aprender el oficio. En el obrador estuvo tres años, con una vida más dura. Del obrador pasó al salón y se ganó la confianza de su propietario, que le permitió dar banquetes en casas particulares.
En agosto de 1913, Salvador Robles lo consideraba ya de su máxima confianza y quiso que, entre sus nuevos planes, pasara al mostrador. Aunque agradeció la propuesta, Antonio Valls no se quería anquilosar, por lo que decidió marcharse a América para ampliar sus conocimientos.
El 2 de octubre de 1913 marchó
Introdujo el famoso dulce, registrado con la marca Ambrosia, y fue pionero
Se trasladó a Buenos Aires y permaneció allí cinco años ampliando su formación
a Buenos Aires, con sus ahorros, en el vapor Santa Rita. Su actividad profesional empezó en la confitería Las Violetas, y tras una carrera profesional por diferentes locales, se trasladó a la ciudad de Junín, donde trabajó en una de las confiterías más importantes. Tras un corto tiempo, volvió a Buenos Aires y se colocó de jefe en el gran Hotel de Londres, donde amplió sus conocimientos en distintas materias.
Tras cinco años en Buenos Aires, decidió irse a París para estudiar francés, pero el propietario de la confitería Viena, Salvador Robles, le dijo que dejara sus planes y se volviera a Cádiz, que le tenía reservada la mejor plaza de dicha confitería.
Así, decidió volver a España en el vapor Reina Victoria Eugenia, llegando el 18 de octubre de 1918. Se reincorporó en la cafetería Viena el 20 de octubre, concediéndole su propietario amplios poderes para dirigir el negocio.
En el año 1923 se reforma la pastelería y el salón de té, y en el año 1929 hizo realidad su vocación adquiriendo la propiedad de la confitería Viena, tras el retiro de la vida activa comercial de Salvador Robles. Antonio escribió: “Mi vida comercial nació con un pasivo muy superior a mi pequeño activo, teniendo como único capital mis conocimientos básicos, esto unido a mi constante perseverancia dieron el fruto apetecido”.
Antonio Valls estuvo en activo con la pastelería hasta 1969, cuando cerró debido a su edad y al no seguir en ella ninguna de sus cuatros hijas. Falleció en Cádiz el 24 de enero de 1971.
Valls Garrido fue el creador del turrón de Cádiz y quien introdujo junto a Juan Cunill, de origen mallorquín, la elaboración de la especialidad de la ensaimada mallorquina en la ciudad de Cádiz.