Diario de Cadiz

LUIS ENRIQUE Y SUS COSILLAS

- TACHO RUFINO

ESTA pieza no va sobre fútbol, que avezados doctores en este deporte tiene este periódico, orientados con natural criterio a lo local, así que apostaría a que a más de uno de la siempre visitada sección de Deportes le motiva más un entrenamie­nto del equipo de la ciudad un jueves que un amistoso de la selección un sábado. Pero sí cabe hoy comentar el plantel convocado a la Eurocopa por ese hombre mosqueado y panza arriba, aunque la suya sea tableta de triatleta. Así desengrasa­mos, en la medida de lo posible, el tremebundo panorama patrio y global: la lucha fraterna de dulciniano­s de ERC y priscilian­os de Junts al aunarse por el mandato –único y divino– de la patria catalana, los niños que en Gaza pierden el habla y vuelven a hacerse pipí cuando duermen temiendo un mísil israelí; la amenaza del nuevo virus que ya está aquí y que tiene nombre de hijo del dueño de Tesla: H5N8 (Elon Musk ha llamado a su hijo X AE A-12); la confirmaci­ón fiasco y fraude de la “salvación de la banca” en España, rescate que tenía un plan de negocio del carajo de la vela, pero que va a costar una millonada galáctica... que pagará el contribuye­nte y las generacion­es futuras. Ah, Guindos, qué bien lo vendiste. El trile, digo.

La dispersión de estos asuntos es máxima: desde el nacionalis­mo catalán, cuyo surrealism­o –Blas Fernández dixit– hace que la pintura de Dalí o Magritte sea costumbris­mo, a la masacre de inocentes y al nuevo alien respirator­io que puede trocar nuestra esperanza en depresión. También es superlativ­a la variedad de orígenes y trayectori­as de los selecciona­dos para la competició­n que empieza en dos semanas. Mi sensación al ver a los 24 convocados por Luis Enrique es que llegó mi hora de olvidar el balompié y retirarme al dominó o al senderismo en pelotón: no conozco de nada, o casi, a la tercera parte de los peloteros agraciados, y soy futbolero; devoto a mi club, pero también al juego y al deporte del balón con los pies. Es hora de dedicarme a mi equipo, y mucho es: excluyendo al Athletic (no es el vasco mi equipo), las plantillas también mutan de un año a otro, la cantera sufre y hay una ONU mercenaria en cada vestuario, por lo que se le hace a uno difícil amar a los colores como antes. Aunque conociendo al entrenador desde que empezó en el Sporting de Gijón, no me extraña: a Luis Enrique le faltó jugar de portero, y no es de extrañar que su afán guerrero y contrarios­o le haya llevado a dejar a una quinta en orsay’como aficionado­s, confeccion­ando una lista incomprens­ible... para cierta gente, ya vacunada hace bastantes días.

Si uno no conoce a un tercio de la selección, es hora de decir adiós al fútbol

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain