Tecnología punta para una calidad del aire óptima en Riotinto
Innovación ‘made in Huelva’ de Atalaya y la Universidad de Huelva para esta tecnología que neutraliza el potencial impacto de la actividad minera en la atmósfera de su entorno
LA mina de Riotinto, de la mano de Atalaya Mining, acaba de cumplir seis años desde que retomó la producción de cobre. Más de 800 personas acceden diariamente a su puesto de trabajo en una operación minera, que está superando todos los registros históricos de producción y recuperación metálica.
Estas cifras hablan de crecimiento y consolidación de una gran industria en la provincia. Y van acompañadas de una estrategia de responsabilidad con el territorio, que incluye un control exhaustivo sobre las actividades que se acometen diariamente y que puedan generar cualquier impacto en el entorno. Atalaya, de acuerdo con su política ambiental, continúa promoviendo la mejora continua en sostenibilidad, implementando gradualmente mejoras en diversas áreas del proceso productivo. De entre estas, por su carácter innovador, sobresale el control de las emisiones difusas y de la calidad del aire.
EL CONTROL EN LA CALIDAD DEL AIRE, UNA PRIORIDAD PARA LA OPERACIÓN
Desde el inicio Atalaya ha mantenido una estrecha colaboración con la Universidad de Huelva, participando conjuntamente en proyectos de investigación científicotecnológicos con el objetivo de la excelencia ambiental. Destaca la instalación de una red de cinco sensores fijos que cuentan con la tecnología Airvisual, y que miden en continuo la concentración de partículas PM2,5 y PM10. Cuatro están situados en zonas estratégicas de las instalaciones mineras y un quinto instalado en la aldea de La Dehesa, el núcleo urbano más cercana a la operación. Su función es controlar que la composición del aire se mantiene dentro de valores considerados como saludables, de conformidad con los estándares internacionales. Esta medición en tiempo real permite a los técnicos de Medio Ambiente conocer los datos de concentraciones puntuales de partículas, y tomar las medidas de mitigación que permitan subsanar de forma inmediata posibles fuentes de emisiones fuera de lo esperado, evitando así afectar a la calidad del aire. Además, Atalaya cuenta con un sensor móvil instalado en un vehículo de la compañía, que va realizando mediciones continuas por toda la operación. Su recorrido responde a un diseño planificado previamente, para ir controlando la evolución de las emisiones difusas en tiempo real; para ello analiza la concentración de partículas PM2,5 y PM1. En este caso, se trata de AirCasting, que va un paso más allá en el control de la composición de partículas en el aire. Este sensor móvil refuerza la capacidad de reacción a la hora de tomar decisiones operativas con criterios de excelencia ambiental.
PREDICCIÓN METEOROLÓGICA COMO HERRAMIENTA PARA LA BUENA CALIDAD DEL AIRE
La mina de Riotinto cuenta con un servicio de pronóstico meteorológico y de Calidad de Aire específico del ámbito de actuación del proyecto minero desarrollado por la empresa METEOSIM. Mediante una aplicación digital se puede controlar parámetros meteorológicos como la velocidad y dirección del viento, la altura de la capa límite o las precipitaciones, entre otros. Esta herramienta permite a los técnicos de Medio Ambiente visualizar qué recorrido hace una determinada partícula de aire que sale de un punto dado del proyecto y, según el factor meteorológico, determinar hacia donde se va a dirigir. Esto es de gran utilidad, especialmente en la planificación de las voladuras: si las predicciones señalan que pueda afectar a zonas cercanas a la operación, se modifica su ubicación. En definitiva, se trata de condicionar las decisiones operativas a la salud y el bienestar del entorno.