Camposoto, un refugio divertido gracias al surf
La Escuela de Surf Camposoto organiza otro año más cursos para mayores de 12 años y repite el éxito de los campamentos de verano
Una forma divertida para que los más pequeños disfruten del verano. Una opción para aquellos padres que trabajan y no tienen con quien dejar a sus hijos en las vacaciones estivales. Una forma de mantener la actividad para la Escuela de Surf Camposoto. Los campamentos de verano vuelven a ser por segundo año consecutivo todo un éxito de participación en la playa isleña, que es así un refugio de diversión gracias al surf. Esta propuesta se suma a los habituales cursos y a la posibilidad de alquiler de material para esta práctica.
“El año pasado tras el confinamiento y tan reciente los meses duros del covid pensamos que iba a ser nefasto y se nos ocurrió poner en marcha los campamentos. Fue un bombazo”, explica Antonio Conesa, uno de los responsables de la Escuela de Surf Camposoto. Fue toda una novedad y, a tenor de los resultados también de este año, todo un acierto. Desde el inicio de los meses estivales y en periodos semanales, numerosos niños participan de las actividades programadas de lunes a viernes entre las 9.30 y las 14.00 horas. “Algunos repiten a la semana siguiente”, señala sobre la aceptación también entre los menores. En concreto, está destinado a pequeños de entre 6 y 12 años.
El surf es la actividad central de estos campamentos, pero no la única pues se va combinando con otras acciones. Además de pádel surf, practican tiro con arco, fútbol playa y voley playa, y reciben charlas de concienciación medioambiental, “para saber cómo pueden contribuir al cuidado del entorno natural, el daño que producen los plásticos y otras cuestiones”, detalla Conesa.
A eso se suma un taller de pintura y un recorrido por parte del sendero que llega hasta la Punta del Boquerón, aunque ellos avancen hasta la playa canina. “El monitor va explicándoles por el camino la ubicación de Camposoto y de San Fernando, y recuerda que es un pueblo marinero y salinero. Les habla de la fauna y la flora. Al final tenemos localizada una duna desde la que se tiran con las tablas de surf”, añade. “Intentamos mantener las medidas de seguridad, con distancias, con mascarillas, aunque cuando entramos en el agua es el momento de quitarlas”, deja claro. Al término de la semana reciben un diploma de su graduación como surferos, en una cita a la que acuden también los padres.
Por otro lado van los cursos de surf, ya habituales en la playa de Camposoto, en los que pueden inscribirse a partir de 12 años. También es para adultos, aclaran. Pueden ser de un, dos o tres días y el más completo es de cinco. “Se enseña la dinámica, cuestiones de seguridad, el transporte de la tabla, cómo coger las olas, incluso se les habla de la meteorología y de los vientos. Al final consiguen surfear solos”, asegura este socio de la Escuela de Surf Camposoto.
Las clases, igual que el campamento del verano, seguirán todo el verano y los interesados pueden inscribirse a través de www.escueladesurfcamposoto.com. El centro, que desarrolla su actividad en la pista número 8 (en el último acceso), cuenta con siete monitores para atender las actividades que organizan: ya sea el campamento y los cursos, o las rutas guiadas por el caño Sancti Petri que permiten conocer esta parte del Parque Natural Bahía de Cádiz. Este año cuentan con el big pádel surf, una tabla hinchable gigante a la que pueden subirse hasta 8 personas. “La usamos en el campamentos y los niños se lo pasan bomba”, comenta Antonio Conesa. Los amantes de las prácticas deportivas náuticas tienen también la opción de alquilar el material. “Es la forma idónea para no estar encerrados, estar al aire libre y pasar un día diferente de playa”, animan.