La afición gana por goleada
● Casi 20.000 espectadores, con los cadistas volcados en animar
La mejor entrada de la temporada en el estadio Nuevo Mirandilla (antiguo Carranza), con casi 20.000 personas (19.500), confirmaba que llegaba a la capital gaditana uno de esos equipos que genera locura en los seguidores propios y en los del rival. Buen ambiente en el templo del cadismo, donde los ánimos, al menos casi todo el encuentro, estuvieron por encima de las protestas tan habituales esta temporada.
Al margen del homenaje a Mágico González, el Cádiz-Barcelona dejó las ganas de los aficionados para que se repitiera lo de las dos últimas campañas con este rival. También dejó que parece que se va pasando el malestar con Lucas Pérez y sus ansias por jugar dos categorías por debajo para defender la elástica del Deportivo. Igualmente dejó que Piqué cae mal aquí... y en otros muchos lugares aunque las causas sean más que discutibles. Dejó la sorpresa de la masa social con Momo Mbaye en el once. Y dejó una dosis de calma que también se hace necesaria para todos.
Cualquier partido del Cádiz CF en casa es un espectáculo en los aledaños del campo. Ni que decir lo que se vivió ayer. Las banderas y camisetas amarillas y azulgranas convivían en la calle con respeto y ambientando ese colorido tan necesario y que es el alma del fútbol y del deporte en general. Los comercios de la zona, a los que Carnaval, Semana Santa y Magnas nos les pilla ni de rebote, hicieron su agosto en septiembre, que también es de agradecer.
Dentro del templo del cadismo, la gente vio como Xavi tiene más sangre de entrenador que de jugador por sus protestas en la banda a no se sabe qué... Y vio que la grada alta de Tribuna era más culé que el Camp Nou.
Cayó el 0-1 y el cadismo elevó sus prestaciones cantando el “te quiero Cadi, lololololooooo”. Había que empujar porque en la banda esperaban para entrar Lewandoski, Pedri y Dembélé... Ahí es nada. Tocaba sufrir a pesar de que se llevan cinco semanas de sufrimiento. Se acabó la buena racha contra el Barça. Y es que esta temporada se está acabando todo lo bueno.