Diario de Cadiz

De exorcistas y posesiones

-

Las cosas que tenemos nos poseen. Si nuestra economía nos lo permite, podemos ser dueños de una casa, de un coche, de un garaje, de un local, de una nave, etc. Y esto requerirá de nuestro cuidado y atención para mantenerlo en perfectas condicione­s de uso. Pero no nos importa porque estas y otras cosas parecidas nos dan comodidad y seguridad y pueden ser indispensa­bles para el desarrollo de nuestro trabajo. Pero hemos de saber que si algún día queremos irnos a vivir a otra ciudad, tendremos que vender muchos de esos bienes. De lo contrario, habrá que acudir periódicam­ente a esos lugares de origen para mantenerlo en óptimo estado, pagar todos los gastos y atender los problemas que puedan surgir. Si los alquilas, tendrás que reparar o cambiar lo que a tu inquilino se le vaya estropeand­o con el paso del tiempo. Esto será así si tu inquilino te sale buen pagador. De lo contrario, tendrás que andar con abogados y juicios para echar a tu arrendatar­io. En cualquiera de estos casos, tu paz se verá mermada. Ahora, imagina que tienes dos casas: una en la ciudad donde vives y otra en la montaña o en la playa. En primer lugar, te verás obligado a ir allí periódicam­ente a darle un repaso: ver si se metieron okupas, ladrones, alguna rotura, hielo en las tuberías, etc. Y si por jubilación, divorcio o muerte de algún miembro de la familia quieres cambiar de forma de vida, estos bienes serán un obstáculo. Será entonces cuando pagarías lo que fuera a un exorcista para que te libere de tus posesiones. Será entonces cuando recuerde a Regan MacNeil... Venancio Rodríguez Sanz (Correo)

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain