40 años del Río San Pedro: del despropósito al eterno olvido
● Los vecinos de la barriada puertorrealeña celebran cuatro décadas desde la llegada de los primeros pobladores a una zona que el franquismo proyectó como una gran ciudad y acabó como un área aislada
y ocupación.
En el avance del plan se contemplaba nada menos que la creación de 30.766 viviendas para una población permanente que se estimó en 107.680 personas. A esto se sumaban otras más de 5.000 viviendas planeadas como segundas residencias y más de 23.000 plazas turísticas. El objetivo final era que la población total de esta “nueva ciudad” sobrepasase en temporada alta de turismo las 136.200 habitantes. Es decir, una población mayor que la de la propia ciudad de Cádiz, que además en esos momentos estaba intentando poner en marcha el fallido proyecto ‘Cádiz-3’, cuya pretensión era urbanizar todo el espacio entre Cortadura y San Fernando, para albergar a medio millón de habitantes más.
El terreno elegido para el ACTUR-Río San Pedro (más de un tercio inundable) incluía zonas de especial interés medioambiental, desde el propio parque de Los Toruños y Pinar de La Algaida, a los pinares del Río San Pedro, la Playa de Levante y las Salinas de El Trocadero. El Plan, entonces orquestado desde el INUR (Instituto Nacional de Urbanización) del Gobierno de Franco, era tan ambicioso como falto de sensibilidad medioambiental.
“El modelo de desarrollo que se planteaba para este lugar fue un verdadero disparate. Solo se sostenía en la cabeza del Gobierno del franquismo”, dice el ex alcalde de Puerto Real, José Antonio Barroso, que lideró el primer ayuntamiento de la Democracia del municipio, y que, en gran medida, puso fin al despropósito del Plan ACTUR, que acabó fracasando en todos los lugares de España en los que se inició.
“Cuando llegan las democracias municipales y cuando el movimiento ecologista ya está en ciernes, empieza a cuestionarse este proyecto”, recuerda Barroso. Cuando él llegó al Ayuntamiento en 1979, ya han empezado a desarrollarse en el barrio las 202 viviendas de Coteviso y las 429 viviendas de protección oficial que impulsó el Ministerio de la Vivienda de entonces, junto con gran parte de la urbanización de la zona.
“Nosotros empezamos a trabajar en un Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), que finalmente se aprobó en 1982, que lo primero que hace en el Río San Pedro es crear zonas de equipamiento, que no había ninguna, porque todas iban a la parte de El Puerto de Santa María”, afirma el ex alcalde. Ese PGOU, también protegía los pinares, definió las áreas universitarias y limitó el suelo industrial, prácticamente a lo que ya estaba urbanizado.
Esto conllevó un fuerte enfrentamiento con la administración del Estado y con la Junta de Andalucía, “que había pasado a sustituir a la administración franquista como promotora de los suelo, y la que los vendió y ganó dinero”. Así, recuerda el ex alcalde, que cuando se terminan de ocupar los espacios residenciales no había ni un solo equipamiento hecho, a excepción del colegio de Primaria. Fue el Ayuntamiento el que tuvo que ponerse manos a la obra, para dotar al barrio de lo que hoy disfruta: Instituto, Centro Cívico, Pabellón cubierto, centro de salud y un campo de fútbol, entre otro equipamiento.
No se cumplía, por tanto, ni tan siquiera el preámbulo del Decreto-Ley de los ACTUR, que determinaba que, además de la construcción de viviendas ase