Siguen las diferencias por la ley del ‘solo sí es sí’ en el Gobierno
● La ministra de Ciencia apuesta por una revisión de la norma en su visita a Sevilla
La ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, señaló ayer que, si el poder jurídico interpreta la ley de libertad sexual, conocida como la ley del solo sí es sí, “de manera distinta a lo que ve el poder legislativo y no se está cumpliendo con la voluntad del legislador todavía” existe una “oportunidad de ajustar lo que haga falta”.
En declaraciones a Canal Sur Radio, la ministra añadió que los “jueces son los que tienen que hacer cumplir con las leyes que se generan en la sede del poder del pueblo, que son los que legislan”.
En este sentido, recordó que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dijo ayer que el Ejecutivo “estudiará la interpretación que hacen los tribunales para ver si hay que ajustar la ley para que se cumpla la voluntad del legislador”.
Admitió que es una ley que puede generar ciertas dudas en su aplicación y, por eso, se estaba pendiente de la interpretación de la Fiscalía y del Tribunal Supremo, si bien dejó claro que la ley nació con una “voluntad clara de proteger a las mujeres frente a los delitos de acoso, abuso y agresión”.
Por su parte, Podemos defendió que la ley es “sólida” y un “avance incuestionable”, cuyo problema no es la norma sino una “incorrecta” aplicación por parte de algunos jueces, y no duda “ahora mismo” del apoyo a la normativa por parte del ala socialista, dado que tanto Morant, como la ministra de Defensa, Margarita Robles, ya “recularon” al apuntar a la posibilidad de revisión al inicio de la polémica.
Así lo indicó la coportavoz estatal de la formación, Isa Serra, previa a que el presidente del Gobierno Pedro Sánchez se mostrara ayer abierto a modificarla puntualmente, si bien esos retoques se harían después de que se vuelva a pronunciar el Tribunal Supremo y establezca ya jurisprudencia. Mientras, desde Podemos insistieron durante las últimas fechas que nadie planteó ningún cambio concreto a la legislación
Para Serra, la controversia sobre la ley radica en un “alarmismo” fomentado por la “extrema derecha” a través de una “ofensiva” que va a continuar, dado que se llegó a decir al inicio que iba a “hacer falta un contrato para mantener una relación”, que se iba a “meter en la cárcel por decirle guapa a una mujer” y ahora acusan de que va a dejar “violadores en la calle”.
De esta forma, Serra concluyó que la diversas ministras socialistas salieron a cuestionar la ley apelando a la revisión para responder a esa “campaña”, pero después la mayoría de ellas “han reculado” y tomaron el “camino de valorar, apoyar y sostener la ley del solo sí es sí. Es más, comentó que ahora mismo no duda de que esa continúe siendo la postura del PSOE.
La dirigente de la formación morada subrayó que no tienen datos exactos de revisión de penas a condenados por agresión sexual y violación en distintas audiencias provinciales, pero por lo que conocen considera que son “minoría” respecto a los que optan por mantenerlas.
Y es que la dirigente del partido morado reivindicó que el objetivo de esta norma es “cambiar la cultura de la violación por la del consentimiento”, un factor que ahora se “pone en el centro” junto a la garantía de los derechos para el conjunto de mujeres que sufren agresión sexual.
Aseveró que se protege a todas las víctimas con independencia de que presenten denuncia, algo que solo hace el 8% mientras que el 92% quedaba fuera de esas garantías porque desconfiaban de la justicia les diera reparación.
En consecuencia, destacó en materia jurídica que la ley simplemente “transforma” el esquema del Código Penal, para atender los cambios culturales impulsados por el movimiento feminista para que sea agresión todo lo que no sea consentimiento.
Morant afirma que el texto “no está cumpliendo con la voluntad del legislador”