La Semana Santa de 1890
● Repaso por las cofradías y las atribuciones artísticas que estaban vigentes hace 134 años
ANTE todo tenemos que hacer una breve aclaración sobre los textos que exponemos respecto a la Semana Santa de Cádiz de 1890. Primero se atiende en cuanto a su grafía a la época que reseñamos y en segundo lugar hay que situarse en los conocimientos escultóricos del momento nada que ver con los avances y actualizaciones habidos hasta nuestro días. Sirvan de ejemplo los evidentes avances obtenidos.
Bajo el patrocinio de las Excmas. Corporaciones Provincial y Municipal , con el concurso los mayordomos y presidentes de las diversas Cofradías, y con el auxilio del vecindario, ha conseguido la Comisión de vecinos que ya en otras ocasiones se ha esforzado por dar brillo que en un tiempo tuvieron la demostraciones externas del culto católico en Cádiz, que este año recobren su antiguo explendor.
Al efecto se propone que hagan estación a la Santa Iglesia Catedral las procesiones que otras veces lo hacían con toda la solemnidad que de suyo exije lo religioso de estos actos y con la misma brillantez de años anteriores.
Durante los días de la Semana Santa Mayor se celebrarán en todas las iglesias parroquiales y en muchas que no lo son, los Divinos Oficios, y tendrán lugar sabias pláticas y sermones a cargo de las principales lumbreras del clero gaditano, además de los Ejercicios de Tinieblas y demás actos religiosos que con tanta pompa ha tenido lugar siempre en Cádiz, sobre todo en su Santa Iglesia Catedral.
Las procesiones comenzarán el Martes Santo y tendrán lugar en este día y los siguientes Miércoles, Jueves y Viernes Santo.
Los antecedentes históricos y artísticos de las cofradias e imágenes son los siguientes :
MARTES SANTO
La cofradía de penitencia del Santísimo Cristo del Prendimiento estuvo establecida en la Iglesia Convento de las Descalzas de la Pura Concepción, hasta el año 1810 en que fue disuelta. La escultura de su titular la trajo de Roma el Licdo. Mesa, Alcalde
Mayor de esta ciudad y es obra del escultor Antonio Franzí.
Con el título de Hermandad de los Vizcaínos se estableció en el Convento de San Agustín la que daba culto al Ssmo. Cristo de la Humildad y Paciencia, escultura del célebre González (El granadino).
La Cofradía del Santísimo Cristo de la Columna, desde época remota tributaba sus cultos en una Hermita del Campo de la Jara
(hoy parroquia de San Antonio); llamábase Cofradía de la Columna y Resurrección. Su Imágen primitiva de resultas de haber salido en procesión de rogativas, la abundante lluvia impidió su regreso al Templo respectivo, quedando en la Iglesia de San Juan de Dios, donde la comunidad de Religiosos le dedicó altar y costeóle columna de plata. Ambas esculturas son obra del escultor sevillano Pozo; San Juan Evangelista y Nuestra Señora de las Lágrimas, de uno se sus discípulos.
MIERCOLES SANTO
En el Convento de Religiosas Agustinas, advocación de Candelaria , desde época muy antigua tenía un altar dedicado al Señor de la Sentencia; de resultas de estar establecida en el mismo Templo la Cofradía del Santísimo Cristo del Descendimiento fué costumbre sacarle en procesión; la escultura fué donación de un devoto que la adquirió en Sevilla y donó á la Reverendísima Priora.
En el Oratorio del Beaterio tuvo en un principio instalada la Cofradía del Ssmo. Cristo del Ecce–homo y al presente en la Iglesia de la Conversión de San Pablo; escultura del titular es obra de Pedro de Vergara.
JUEVES SANTO
Una de las cofradías que se establecieron primeramente en la Casa Grande Convento de Franciscanos Observantes fue la del Santísimo Cristo de la Vera–cruz; la escultura de su titular y Oración del Huerto son obras del escultor González (El granadino).
Donde estaban los almacenes de la pólvora de esta plaza existía en 1500 una Hermita dedicada y costeado a Nuestro Padre Jesús Nazareno por los armenios, aquellos que no participaron de la explosión como sucedió a los moriscos. Por espresa Real orden comunicada al Gobernador de esta plaza, Conde de Fernán Núñez, se exponía quedaban exceptuados del extrañamiento general, por ser cofrades de Nuestro Padre Jesús. En el año de 1616 se instaló en el Monasterio de Santa María, adquiriendo sus cofrades capilla propia, y no siéndole suficiente compraron la que estaba á su espalda de Nuestra Señora de los Ángeles, conocida por la de los Corbanales.
En su actual capilla se observan azulejos con inscripciones armenias, juntamente que una lápida marmórea de suma importancia de que hace referencia el Corpus inscriptionum Semitucorum.
La escultura de su titular, San Juan Evangelista y Nuestra Señora de los Dolores, fueron retocadas por Vergara (El valenciano).
VIERNES SANTO
La muy antigua Cofradía del Ssmo. Cristo de la Piedad y María Ssma. de las Lágrimas estaba establecida en la Hermita de Sta. Catalina; destruida ésta pasó al Convento de Carmelitas Descalzos y por necesidad de la Comunidad se trasladó al Convento de la Compañía de Jesús (Iglesia de Santiago), si bien al presente cerrada al culto la expresada Iglesia accidentalmente se veneran sus Imágenes en la Iglesia de San
Agustín. Su primitiva titular padeció mucho en el saqueo del inglés y sus cofrades encomendaron la obra al inspirado artista, célebre escultor murciano D. Francisco Salcillo y Alcaraz.
En el Convento de Ntra. Señora de Candelaria de Religiosas Agustinas tuvo principio y al presente en el Convento de Padres Predicadores (Santo Domingo) se halla canónicamente instituida la Venerable Cofradía del Santísimo Cristo del Descendimiento. La escultura advocación y demás Imágenes fueron hechas en Sevilla.
Procedente del Monasterio Cartuja de Jerez de la Frontera, y debida á las gestiones del varón apostólicos Fr. Domingo de Silos Moreno, Obispo de esta ciudad, fué instalada tan bellísima escultura en la Santa Iglesia Catedral; es obra del inspirado artista murciano D. Francisco Salcillo y Alcaraz.
Entre las Cofradías y Hermandades que se establecieron en el Convento Casa Grande de Franciscanos Observantes se contaba la del Santísimo Entierro de
El Martes Santo salía el Prendimiento de las Descalzas, Columna y Humildad y Paciencia
Los Crucificados de Descendimiento y de Piedad se atribuían al célebre Salzillo
Nuestro Señor Jesucristo.
En el año de 1637 se trasladó á la Hermita de San Roque, según pudo justificarse por dos lápidas que hallaron entre los escombros de la destruida Hermita, quedando en 1750 instalada en el Convento de Concepcionistas de Santa María .
Se ignora quién fué el escultor que hizo tan bella Imágen, pero consta que la Cofradía llegó á un alto grado de esplendor tal, que todos los años se formaba en la plaza de la Corredera un monumento con doce columnas que sostenían una cúpula, bajo la cual se colocaba la urna sepulcral, permanecía allí alumbrada con multitud de luces, desde las siete y media á ocho de la noche, hasta la una de la madrugada, y todas las Comunidades y clero secular entonaban los Salmos del Oficio de Tinieblas.
En un principio la Urna era de ébano con guarniciones de plata de buen gusto y valor. La que actualmente lleva en procesión su Cofradía es de plata construída por el hábil artista, D. Manuel Ramírez.
Continúa la publicación con una exhaustiva descripción de las hermandades citadas; pero sirvan estas notas para situarnos en otra Semana Santa inicio y prolegómenos de la que hoy admiramos y disfrutamos.