La prudencia se impone en Humildad y Nazareno Teresa Almendros
● Las dos hermandades del Jueves Santo decidieron cancelar sus salidas procesionales a causa de los pesimistas partes meteorolóicos, que amenazaban lluvia
EL Jueves Santo comenzaba en El Puerto con los ojos puestos en el cielo, después de una primera parte de la Semana Santa sumamente accidentada a causa de la lluvia.
La hermandad de la Humildad y Paciencia, cuya salida estaba prevista para las cinco de la tarde, decidió finalmente no realizar su estación de penitencia, tras el acuerdo adoptado por su junta de gobierno, ante las previsiones de lluvia intensa para aproximadamente las nueve de la noche.
La jornada amanecía gris y cayeron algunas gotas hacia las dos de la tarde. Desde primeras horas de la mañana la actividad fue intensa en las dos hermandades del Jueves Santo, la hermandad de la Humildad y Paciencia y la de El Nazareno, que este año como novedad salía desde su Casa de Hermandad en la calle La Palma.
La hermandad de la Humildad y Paciencia realizaba a las diez de la mañana una ofrenda floral a sus titulares, con el rezo del ángelus a las doce y un reconocimientos a los hermanos. A la una se cerraban las puertas del convento del Espíritu Santo, sede temporal en la que se alojan los titulares de la hermandad desde el cierre de la Capilla de la Aurora, ya hasta las cinco de la tarde, hora prevista para la salida procesional, que finalmente se vio truncada por el mal tiempo.
Se da la circunstancia de que el próximo año el convento será testigo de la salida de la nueva hermandad del Prendimiento, en el Lunes Santo portuense.
La Humildad continúa con el proceso de dorado del paso del Santísimo Cristo de la Humildad y Paciencia, que estrenaba este año el dorado de las esquinas y la parte frontal del respiradero delantero. En el medallón central se refleja una pintura de la cruz de la orden del Espíritu Santo, que la hermandad ha querido grabar en el frontal del paso como símbolo de la generosidad mostrada por las hermanas en estos años de ausencia de su capilla.
También han llevado a cabo los trabajos de policromía y estofado al temple de los elementos ornamentales y florales.
Otro detalle acompañaba a la señora del Desconsuelo, la pintura sobre dos velas de la Candelaria del paso de palio en conmemoración del año jubilar aprobado por el papa Francisco al cumplirse el 825 aniversario de la aprobación por el papa Inocencio III de la orden del Espíritu Santo fundada por el beato Guido de Montpellier. En una de ellas se refleja la blanca paloma sobre el papa Francisco con la cruz de la orden y en la otra se añade una mano y el corazón para impartir la bendición de las hermanas comendadoras del Espíritu Santo, una pintura realizada y donada por José Fernández Villegas.
También se estrenaba el juego compuesto por seis jarras que acompañan a la señora del Desconsuelo en su paso de palio, confeccionadas a juego con las existentes en el taller de orfebrería Olmo de la Villa de Rota, detalles todos estos que no se pudieron lucir en la calle a causa de la suspensión de la salida procesional.
El Jueves Santo terminó de venirse abajo en El Puerto con la suspensión de la salida procesional de la hermandad de El Nazareno, fijada para las seis y media de la tarde.
La hermandad tenía prevista su salida este año desde su casa de hermandad de la calle La Palma, desde donde los hermanos escucharon la decisión de la junta de gobierno y la respaldaron con un aplauso, ya que
valoraron la prudencia de los dirigentes de la hermandad.
Hay que tener en cuenta que en el desfile del Nazareno participan muchos niños y se optó por evitar cualquier riesgo derivado de un intenso chaparrón.
Los hermanos del Nazareno comenzaban el día rezando por los marineros que perecieron en la mar, con la tradicional ofrenda floral en el monumento al Pescador, en la avenida de la Bajamar.
También se homenajeaba a los hermanos que cumplen 50 años y se realizó la tradicional ofrenda del grupo joven y cuerpo de acólitos a sus titulares. La hermandad también encendió los dos cirios especiales para la Virgen por las personas con trastornos del espectro autista y con síndrome de Rett.
A pesar del desapacible viento que reinó durante toda la jornada, las calles portuenses se llenaron de personas que quisieron ver de cerca la salida, finalmente frustrada, de las dos procesiones de la jornada, después de que hasta hoy solo las hermandades que procesionaron el Martes Santo hayan podido completar sus recorridos de forma íntegra. El Domingo de Ramos La Borriquita fue la única hermandad que salió a la calle, teniendo que regresar a su tiempo antes de tiempo a causa de la lluvia, lo mismo que le pasó el miércoles a la hermandad de El Olivo.
Con la suspensión de las dos procesiones del Jueves Santo las esperanzas están puestas ahora en la jornada del Viernes Santo, con la Veracruz y la Soledad.