Óscar Lobato y una historia brillante
● El escritor y periodista ha publicado ‘Las lágrimas de Iliria’, una novela trepidante que gira en torno a la búsqueda de siete de los más valiosos diamantes
UN MAGNÍFICO PERIODISTA. Óscar Lobato (Madrid, 1958) es periodista y ha desarrollado su trayectoria profesional en las agencias de noticias LID y EFE, así como en los periódicos Diario 16, Europa Sur y Diario de Cádiz, estos dos últimos del Grupo Editorial Joly. Es autor de numerosos reportajes en revistas especializadas, así como colaborador en diversas emisoras de radio y televisión. Antes de este ha escrito las novelas Cazadores de humo, Centhaure y La fuerza y el viento, todas ellas editadas por Alfaguara.
HAY novelas negras que pueden ser luminosas. Subgéneros dentro de historias de suspense. El periodista y escritor Óscar Lobato ha tejido una de ellas, una trepidante que arranca a toda mecha y que transita de esta guisa por media Europa. Porque su experiencia en la información de las Fuerzas Armadas le ha servido para desarrollar una novela de muchos quilates en la que, como siempre ocurre con sus obras, nos regala un torrente de información capaz de atesorar con su prodigiosa memoria y soltar sin un titubeo en espléndidas presentaciones literarias que son, en sí mismas, todo un espectáculo.
Y es que tras seis años de duro trabajo, Óscar Lobato ha publicado recientemente Las lágrimas de Iliria (editorial Cazador), en la que un ex militar español es el gran protagonista, con permiso de siete de los más valiosos diamantes históricos. Unos pedruzcos que han permanecido en paradero desconocido durante décadas, hasta que un hombre de aspecto balcánico ofrece una de esas gemas a un joyero y lapidario italiano radicado en Bérgamo, la capital de las transacciones, digamos, más oscuras en el mercado de diamantes del planeta.
Dálibor Schmidt, ex legionario con raíces balcánicas que conoce perfectamente la antigua Yugoslavia de Tito, recibe de parte de un magnate bancario de Zúrich el encargo de recuperar los codiciados brillantes. Es una tarea complicada en la que contará con el apoyo de un personaje fascinante del que no daremos más detalles para evitar hasta el más mínimo spoiler. Responde al nombre de Kuga, que en lengua croata puede ser traducido como Peste o Plaga. Y eso es lo que será para quienes le conozcan.
Con personajes secundarios lleno de aristas, Óscar es capaz de ir avanzando por la novela mientras nos cuenta la triste historia de la bella y desaparecida Ragusa, donde hoy se levanta Dubrovnik, y que fue destruida por un devastador terremoto que propició el extravío de esos siete diamantes. Dando tumbos han ido pasando de mano en mano, desde Italia a España, y desde allí a Francia en poder del propio José Bonaparte, incapaz de desprenderse de algo tan bello.
Sobre la historia real de las gemas y de este ex militar español, Óscar Lobato muestra su pericia como grandísimo periodista de sucesos para investigar una trama muy oscura donde no falta el derramamiento de sangre, los sinsabores, ni las traiciones. Y hasta ahí puedo leer.
Como el propio Óscar nos contó, además la novela quiere servir de tributo a las mujeres y a los militares españoles, “a los que antes de llegar, ya estaban puteando y que tuvieron un desempeño excepcional: hasta el punto de que en Móstar hay una plaza de España en su honor”.