Corbyn rompe la baraja al no renunciar May a un ‘Brexit’ sin acuerdo
El laborista se niega a participar en las consultas con la oposición de la ‘premier’, cuyo plan B será votado el 29 de enero
Theresa May convocó ayer otra votación sobre el Brexit el 29 de enero tras reunirse con los líderes de la oposición, menos el laborista, Jeremy Corbyn, quien rechazó la oferta hasta que se descarte una salida sin acuerdo de la UE. En una carta a Corbyn, May consideró “imposible” excluir la hipótesis de salir sin pacto el próximo 29 de marzo y dijo que, para evitarlo, o bien el Parlamento aprueba un acuerdo consensuado con Bruselas o bien el Reino Unido ha de cancelar el Brexit ,lo que incumpliría el resultado del referéndum de 2016.
Además de a sus rivales, May recibió en su despacho de Downing Street a varios colegas conservadores contrarios a su acuerdo para la salida de la UE, en un intento por perfilar el plan alternativo que ha de presentar el próximo lunes en la Cámara de los Comunes.
Este plan B, que sustituirá al pacto rechazado por los diputados el pasado martes, será votado el 29 de enero, después de que May mantenga próximamente conversaciones con representantes de la UE, indicó su portavoz.
Aunque sólo faltan 70 días para la fecha de salida del bloque comunitario, la primera ministra no pedirá una prórroga del artículo 50 del Tratado de Lisboa para
extender las negociaciones con Bruselas, aseguró la fuente.
May se ofreció a escuchar a los dirigentes de la oposición después de superar el miércoles por estrecho margen una moción de censura laborista y de que el martes el Parlamento desechara su plan por 432 votos en contra y 202 a favor.
Corbyn se negó a participar en estas consultas a no ser que May descarte primero una salida de la UE no negociada, y ayer tildó su oferta de consenso de “farol”, dado que no ha cedido en “sus líneas rojas”.
May se vio con el Partido Nacionalista Escocés, tercera fuerza parlamentaria con 35 escaños; el Partido Liberal Demócrata, con 11; los galeses de Plaid Cymru, que tienen cuatro, y Caroline Lucas, la única diputada del Partido Verde. Todos coincidieron en que, aunque la jefa del Gobierno se mostró “receptiva”, fue reacia a variar su postura o aceptar sus propuestas de descartar un Brexit duro y celebrar un segundo referéndum.