Sábanas y espías en los años 60, ‘El escándalo de Christine Keeler’
El canal Cosmopolitan estrena mañana lunes una revisión del escándalo Profumo, que derribó el gobierno británico
La modelo Christine Keeler tenía 17 años cuando se instaló en Londres con aspiraciones de grandeza por lo agraciado de su físico y sus dotes de bailarina. Al poco todo se desbordó y se vio envuelta en unas intrigas políticas imprevistas y se convirtió en la ‘estrella’ que llevó al traste al gobierno de su país por las sospechas de espionaje. Keeler fue espóradica amante del ministro de Guerra, John Profumo, y también mantuvo relaciones con un agregado de la embajada soviética. Lo suficiente para incendiar el ambiente por un novio celoso. No sólo tuvo que renunciar el ministro sino también el jefe del gabinete, Harold Macmillan.
El canal Cosmopolitan estrena mañana lunes, a las once de la noche, El escándalo de Christie Keeler, miniserie que relata estos acontecimientos que sacudieron el Reino Unido de principios de los 60, con la Guerra Fría en su esplendor. Sophie Cookson (Kingsman: Servicio
Secreto) da vida a la joven, que se excedió con su afán de notoriedad. Keeler en lugar de buscar la discreción optó por airear lo sucedido y posó desnuda en un reportaje fotográfico de Lewis Morley que llegó a inspirar a músicos como los Beatles. Las fotografías se hicieron y publicaron en la cúspide del escándalo. Precisamente esas sugerentes fotos iban a promocionar una película que nunca llegó a filmarse: The Keeler Affair, nombre que toma esta serie que retrata una época y los personajes entre las ínfulas y las revanchas. Ben Miles interpreta a Profumo y James Norton es Stephen Ward, el artista que le presentó a Keeler.