Los presos del ‘procés’ salen de la cárcel en tercer grado pidiendo la amnistía
Denuncian el “ánimo de venganza” del Tribunal Supremo y anuncian una participación activa en la campaña electoral
Los siete presos del procés que cumplen condena en la cárcel barcelonesa de Lledoners salieron ayer de prisión mostrando una pancarta a favor de la amnistía, después de que la Generalitat les concediera este jueves el tercer grado, coincidiendo con el inicio de la campaña electoral del 14-F.
Hacia las 10:35 horas salieron de Lledoners el ex vicepresidente de la Generalitat Oriol Junqueras, los ex consellers Jordi Turull, Joaquim Forn, Raül Romeva y Josep Rull, el ex líder de la ANC Jordi Sánchez y el de Òmnium Jordi Cuixart, que a partir de ahora únicamente tendrán que acudir a prisión a dormir de lunes a jueves.
Los siete presos mostraron a los numerosos periodistas que los esperaban a las puertas de la cárcel una pancarta en que se podía leer Amnistía. Hagámonos libres.
“¿Qué podemos esperar de esta Fiscalía?”, dijo Turull a su salida del centro penitenciario, una “Fiscalía –agregó– que ya sabemos cómo actúa” y que “hace mítines de Vox en actos de Ciudadanos”.
Según el ex conseller, la Fiscalía “querría” que los presos del procés estuvieran “arrodillados y rendidos”, pero advirtió: “Estaremos de pie y activos todos los días que estemos en libertad y dentro de la prisión”.
El ex conseller Rull denunció, por su parte, el ánimo de “venganza” del Tribunal Supremo y procés, de la prisión de Puig de les Basses, en Figueras (Gerona), haciendo un llamamiento a la movilización para “volver a ganar” el 14-F.
En el caso de la ex presidenta del Parlament Carme Forcadell, que también cuenta con la propuesta de la cárcel barcelonesa de Wad Ras favorable al tercer grado, la Secretaría de Medidas Penales no ha resuelto aún su clasificación.
Forcadell está confinada en su celda debido a un brote de coronavirus en el centro penitenciario y su cuarentena no termina hasta la próxima semana.
El candidato del PPC, Alejandro Fernández, aprecia un “interés electoralista” y “partidista” en la decisión de Generalitat de dar el tercer grado penitenciario a los presos del procés coincidiendo con el inicio de la campaña del 14-F.
La candidata de JxCat, Laura Borràs, defendió a su vez que el tercer grado de los presos independentistas “no es ningún privilegio ni concesión”.